Y eso que el inicio de partido fue esperpéntico. Quizá el cambio de escenario, se jugó en el Pabellón “San Antonio” en lugar de en el habitual “San José”, despistó a los jugadores. Pero lo cierto es que hubo que esperar cuatro minutos para ver la primera canasta del partido. Las imprecisiones en ambos aros fueron las protagonistas indiscutibles de un primer periodo en el que las constantes ayudas defensivas de los locales evitaban que los jugadores del CB Mora encontraran situaciones de tiro claras.

Mucho cambió el cuento en el segundo cuarto. El conjunto auriverde elevó el ritmo y corrió al contraataque para endosarle un parcial de 12-0 al conjunto moracho. Olió sangre el Atlético Tomelloso y fue a por más. Ahogaron la subida de balón rival con una presión en toda la cancha que forzó innumerables pérdidas de balón de los visitantes, que eran aprovechadas continuamente por los pupilos de Esther Úbeda para aumentar su renta.

Tras el paso por vestuarios, y con una ventaja de 17 puntos en el bolsillo, el Atlético Tomelloso se dedicó a manejar el tempo del partido, lo cual no le impidió seguir aumentando la diferencia en el marcador hasta ponerse 27 puntos arriba mediado el tercer cuarto. A partir de ese momento, el equipo se relajó y bajó su producción ofensiva y su intensidad en defensa.

El último parcial comenzó siguiendo la tónica de los últimos minutos del tercero. El equipo visitante comenzó a ver aro con más facilidad, lo que le permitió seguir el ritmo anotador de los auriverdes. Sin embargo, ya era tarde. Al final, victoria contundente en uno de los mejores partidos de la temporada de un Atlético Tomelloso que se mostró muy sólido en ataque y solidario en defensa.