El contratiempo para los locales  ha sido la lesión de Alberto Leo  a los 13 minutos. Su lugar lo ha ocupado Joaquín que se ha prodigado en lo que  más le gusta: el disparo a puerta. En su primer intento a punto ha estado de sorprender al portero que estaba algo desplazado; en el segundo Estiben  ha blocado con seguridad. Joaquín es joven pero viene pisando muy fuerte.

Con el paso de los minutos ha crecido La Fuente que ha tenido criterio para mover la pelota en el medio, pero  ha mostrado sus carencias para generar situaciones de peligro arriba.  Le ha faltado desborde,  últimos pases de calidad  o capacidad para aprovechar alguna  estrategia. Los zagueros Soria, Ismael, Botar y Calero no se han sentido agobiados en ningún momento.  En el tramo final de la primera parte ha vuelto a mandar el Atlético, desde las apariciones de Roberto y Loren, que han intentado conectar con Chule y Luis Alfonso, las dos referencias de ataque de los auriverdes. 

El partido ha ido cayendo en una segunda mitad en la que ninguno de los dos equipos ha conseguido posesiones largas de balón. La Fuente ha seguido intentándolo sin éxito y el Atlético ha empezado a buscar el segundo que evitara disgustos ante un rival que había remontado en sus dos anteriores partidos.  Loren ha puesto en problemas a Estiben en un buen lanzamiento de falta. Y solo dos minutos después, Luis Alfonso no llegó por milímetros a otra falta lanzada por Loren. Y el peligro ha seguido llegando en otra falta que a punto ha estado de culminar Botar con un buen remate de cabeza. La estrategia tiene mucha importancia en el fútbol. El partido avanzaba y La Fuente seguía sin dar señales de vida en ataque.

Con media  hora de juego por delante, el técnico local ha metido a Carlos Arroyo, el delantero fichado esta semana que está obligado a dar un plus de calidad al ataque auriverde. El segundo gol del Atlético Tomelloso, obra de Joaquín, nació de una recuperación suya, para  asociarse después con Roberto y éste con Joaquín que ha conectado un buen disparo, buscando más la colocación que la potencia. Buen gol para el joven canterano.

Con dos goles de ventaja, el Atlético ha jugado con mayor tranquilidad, gustándose a veces, sobre todo cuando ha entrado en contacto con la pelota un Carlos Arroyo al que se le ve bien de forma.  El partido ha concluido con el golazo de Raúl Lara cuando apenas llevaba un minuto  en el campo, enganchando una magnífica volea dentro del área.  

Al final, 3-0 y buenas sensaciones de un equipo que se está mostrando muy solvente en casa. Todos sumaron para conseguir la victoria, buen partido de los laterales, especialmente el de Dani Soria; muy serios los centrales; enormes en el trabajo y en la elaboración los volantes Agustín y Loren; notable partido de Roberto por la izquierda, bien Joaquín desde su entrada en el campo y cumplieron los dos puntas, Chule y Luis Alfonso. Todos los que entraron después también agradaron. Ahora toca pensar en otro duelo complicado ante el San José Obrero de Cuenca.