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Abascal se da un baño de multitudes en Ciudad Real: “El 11-N ordenaremos detener a Torra”

Belén Rodríguez / Lanza | Martes, 29 de Octubre del 2019
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El líder de Vox Santiago Abascal, la formación que más sube en las encuestas del 10-N, se ha dado este lunes un baño de multitudes en Ciudad Real, ensombrecido porque la mitad de ellas, unas mil según el partido, se han quedado fuera del teatro Quijano (900 personas), el espacio cedido por el Ayuntamiento “socialista” –acabáramos-  para celebrar el mitin. La trabas han sido tantas, según Ricardo Chamorro, diputado electo de Vox por Ciudad Real, que no han accedido a prestarle los pabellones deportivos Rey Juan Carlos o Puerta de Santa María, por lo que Pilar Zamora, “y sus socios de Ciudadanos”, se han llevado esta noche los primeros abucheos del público.

¡Alcaldesa dimisión!

“Las de la prensa, poned ¡alcaldesa dimisión!, que luego contáis lo que queréis”, le ha pedido a los medios una señora que se ha quedado fuera y no entendía que la prensa tuviera preferencia.

Este ha sido el único momento tenso de la noche de una fiesta-mitin repleta de banderas de España, público variopinto venido de toda la provincia, muchos jóvenes y familias con niños.

La música, marca de la casa, ha encendido los ánimos previos a la aparición de Santiago Abascal sobre las tablas del teatro Quijano: ‘Que viva España de Manolo Escobar’ y el ‘Novio de la muerte’, el himno de la Legión que la formación ultra ha rescatado para el gran público.

Abascal ya se ve presidente

El éxtasis de la velada ha llegado con la aparición de Santiago Abascal, recibido al grito de ¡presidente, presidente! Y es que Vox, aupado por las encuesta, ve presidenciable a su líder o al menos decisivo en la etapa que se abrirá el próximo 11 de noviembre.

Cataluña, Torra y el “carroñero de Moncloa”

El líder del partido ultra, que ha repartido a diestro y siniestro, sobre todo al PSOE pero también, y muy duro, al PP, con el que compite en espacio electoral, ha centrado su discurso en Cataluña y ha prometido que si el 11 de noviembre es presidente lo primero que hará será ordenar la detención de Quim Torra, “un presidente de la Generalidad que corta carreteras y apoya el terrorismo. Esto no puede seguir así, hay que detener a Torra y tomar el control de la autonomía”.

Una propuesta jaleada por el público, con gritos de ‘Viva España’ o ‘Cataluña es España’. En opinión de Abascal, “Cataluña vive una golpe de estado permanente desde los gobiernos de Jordi Pujol, con la complicidad de PP y PSOE”, que se acabará cuando Vox sea decisivo. Y ante las críticas de quienes consideran que esas medidas encenderían más los ánimos, a contrapuesto el argumento de que no será así, “llevamos treinta años dándoles todo lo que quieren….”(interrupción y otra vez ovación y gritos de ‘Viva España’).

El ‘okupa’ de Moncloa, es decir el presidente del Gobierno en funciones Pedro Sánchez, y el PSOE, han recibido lo suyo de este pimpampum de un Abascal con la voz algo tomada por la intensa precampaña.

Eso no se hace ni a Franco ni a la Pasionaria

La  exhumación de Franco ha sido otro de los temas del mitin, sin exaltar expresamente la figura de Franco, Abascal le ha reprochado “al carroñero de la Moncloa”, ser un desenterrador de odios, “hay que dejar en paz a los muertos; eso [la exhumación del dictador del Valle de los Caídos] no se le hace ni a Franco ni a la Pasionaria, ni a nadie”.

Al PP le tiemblan las piernas con la ‘dictadura progre’

“A los muertos se les respeta, tanto a los de un bando como a los de otro”, ha seguido para argumentar contra la Ley de la Memoria Histórica, “que Mariano Rajoy no fue capaz de derogar”, porque según dice “al PP le tiemblan las piernas con la dictadura progre”. Y claro ha sido mencionar memoria histórica y recordar al expresidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero, la otra bestia negra de Vox, al que ha responsabilizado de ser el culpable de expandir el odio en España “y hacerlo ahora en las repúblicas bolivarianas”.

Además ha insistido en “el pasado criminal del Partido Socialista, el único partido que tiene más de cien años de historia, y está manchado por ella”, y ha criticado a quienes desde el PP dicen que Vox y el PSOE trabajan juntos, “será por qué piensan que estamos haciendo lo que ellos hicieron con Podemos”. Y se ha despachado contra las políticas económics del PP  con un “Montoro subía los impuestos más que los comunistas”.

Vox, útil y necesario

Antes de Abascal han intervenido Ricardo Chamorro, diputado electo por Ciudad Real que aspira a mantener su escaño el 10-N, y José Antonio Ruiz Valdepeñas, único concejal en el Ayuntamiento de Ciudad Real que ante un teatro Quijano lleno de público y colas para entrar ha recordado los modestos inicios de la formación hace ocho años,  y el hito de conseguir un concejal en Villarrubia en 2015. “Ahora tenemos la oportunidad de hacer más grande el éxito. Toda España ha podido ver lo útil y necesario que es Vox”.

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