La Asociación de Supermercados de Castilla-La Mancha (Asucam) ha pedido a las administraciones que, ante el esfuerzo "arduo" que está haciendo el sector en estos días de estado de alarma y de confinamiento de la sociedad, reconozcan pública y privadamente que distribución de alimentos, tiendas de alimentación, mercados y supermercados "han estado al pie del cañón" y que trabajadores y empresarios han hecho un esfuerzo "enorme" y "lo seguirán haciendo".

Así se ha pronunciado la secretaria técnica de Asucam, María Martínez-Herrera, en declaraciones a Europa Press, donde ha afirmado que con el Gobierno de Castilla-La Mancha "tienen hilo directo" y les han apoyado --ha explicado-- en medidas como dejar a cada empresario fijar el horario de apertura de su establecimiento ya que en algún municipio se quería permitir la apertura solo en horario de mañana.

La representante de Asucam ha recordado que a la hora de introducirse en un supermercado hay que tener en cuenta las medidas de distancia y de aforo, algo que ya se cumple desde hace varias semanas, al tiempo que ha manifestado que, tras una primera semana "complicada" y de acaparamiento de producto, las compras se han normalizado y el comportamiento del consumidor ha cambiado.

Entre los productos más vendidos se encuentran la leguminosa, carne de pollo y cerdo, frutas, verduras, pasta, así como productos de higiene y limpieza --sobre todo lejía--, entre otros.

María Martínez-Herrera ha querido destacar el "civismo" de los consumidores en Castilla-La Mancha, al tiempo que ha recalcado el trabajo "importante" que están realizando los trabajadores de supermercados, cuyos gerentes están tirando de "bolsas de trabajo" en casos donde se necesita personal.

La Asociación de Supermercados de Castilla-La Mancha afronta, como el resto de españoles, una Semana Santa atípica marcada por la prorroga del estado de alarma que, por ahora, se extiende hasta el 12 de abril. Ante esta situación, la asociación considera "adecuada" la medida que ha tomado el Gobierno regional de suspender las dos aperturas autorizadas previamente para los días de Jueves Santo, 9 de abril, y Lunes de Pascua, 13 de abril.

Martínez-Herrera ha explicado que tradicionalmente la Asociación pide poder abrir el Jueves Santo y el Lunes de Pascua porque Castilla-La Mancha es una comunidad que recibe muchos habitantes de otras regiones en Semana Santa y la apertura de supermercados esos días concretos es muy necesaria.

Sin embargo, este año, con la crisis sanitaria que sufre España y el decreto del estado de alarma, esta apertura ya no era necesaria y por ello, cuando el Gobierno castellanomanchego les planteó suprimir esos días, desde los supermercados lo vieron con buenos ojos.

Es una medida que se ha tomado pensando sobre todo en los trabajadores de los supermercados que llevan días de trabajo intenso y ha sido a iniciativa de los sindicatos. "Con tiempo se puede avisar a los trabajadores y los consumidores", ha dicho Martínez-Herrera, quien ha recordado que los supermercados no van a tener la demanda de una Semana Santa "normal" porque no va a haber desplazamientos.

Por lo tanto, la persona que tenga que realizar sus compras la próxima semana será la del consumidor habitual que tendrá lunes, martes y miércoles para planificar sus compras. Jueves y Viernes Santo se encontrará los supermercados cerrados, pero el sábado volverán a estar abiertos, para volver a cerrar domingo y Lunes de Pascua. "Hay tiempo de sobra para hacer la compra", ha enfatizado.

Más adelante, cuando todo pase, se verá qué festivos se podrá abrir, ha explicado la representante de Asucam, quien ha afirmado que en muchas localidades se está estudiando la posibilidad de cambiar su festivo local ante la imposibilidad de celebrarlo por la situación actual, algo que también tendrán que analizar los supermercados.