Pilar Zarco, abogada en ejercicio desde 1981,
reivindica en esta entrevista sobre el futuro de Castilla-La Mancha, tras la
crisis del coronavirus, el papel de la justicia, “la gran olvidada en esta
pandemia”. Centrados en la sanidad, opina que la sociedad ha perdido la
perspectiva sobre otras prioridades como la justicia, básica hasta para cobrar
una pensión alimenticia
Pilar Zarco Daza (Argamasilla de Alba, 61 años),
abogada con despacho en Tomelloso, una de las comarcas de Ciudad Real más
afectadas por la pandemia del coronavirus, reconoce que ha vivido con temor
esta oscura etapa de la historia de Castilla-La Mancha. “Tanto por las
consecuencias físicas del posible contagio, como por la soledad de la
enfermedad o un posible ingreso hospitalario mío o de alguien de la familia”.
De la antigua normalidad echa de menos que no ha
podido reunirse con sus hijos, a los que el confinamiento sorprendió trabajando
fuera, y le preocupa “la incertidumbre en la que nos hemos instalado”, “la
economía es una rueda de la que todos los sectores formamos parte, somos
engranajes que fallan en cuanto falla cualquiera de ellos”, explica en esta
entrevista.
Con 39 años de actividad profesional, dice que esta
crisis es la peor que ha vivido, “porque ha afectado a la gente, además de a la
parte económica, a nivel más personal con fallecimientos y pérdidas”. Y no ve
claro el después a menos que los gobiernos autonómicos y central se pongan las
pilas y no echen en saco roto “las inversiones necesarias en modernización de
la administración de Justicia, la gran olvidada en esta pandemia”
¿Qué viene después? Zarco no sabe bien cómo saldremos
de este atolladero, pero sí que su profesión será esencial en esa ‘nueva
normalidad’.
«Siempre he buscado la defensa de la gente
corriente»
“Sigo y tengo especial dedicación al Turno de Oficio y
considero que es un servicio esencial para la gente que no tiene medios
económicos con los que acudir a los tribunales, siempre he buscado como mis
compañeros la defensa del ciudadano, de la gente corriente que lucha contra los
que parecían mitos intocables como las grandes empresas, entidades bancarias;
contra situaciones injustas que nos encontramos a diario, persiguiendo la plena
garantía de sus derechos, pues no debemos olvidar que solo en un país en el que
funcione su sistema judicial podremos tener unos ciudadanos con sus derechos
plenamente garantizados”, asegura.
La justicia, más que necesaria en la
pospandemia
Abogados y una justicia eficiente serán más que
necesarios en la pospandemia. Zarco no cree que el previsible atasco venga por
las demandas contra las administraciones públicas, “lo que sí supondrá un gran
incremento en el futuro inmediato serán, no solo el aumento de asuntos en los
juzgados sociales o de lo mercantil, sino las reclamaciones civiles por el tema
de divorcios, régimen de visitas, pensiones alimenticias e impagos
arrendaticios”.
¿Y algo positivo de la crisis sanitaria? “No sé si se
puede calificar de positivo pero desde luego la pandemia ha producido un cambio
de perspectivas y de prioridades que creo hemos experimentado todos”.
La primera abogada en Tomelloso
Pilar Zarco Daza fue la primera mujer abogada en
Tomelloso y Argamasilla de Alba. Corría 1981, acababa de terminar la carrera
por pura vocación y reconoce que no estaba muy convencida de que pudiera
desempeñar su profesión en su tierra. Solo había cinco abogados, de gran
prestigio, todos hombres, pero “la ilusión de la juventud y el desafío que
suponía”, recuerda, la hizo intentarlo. Han pasado 39 años de aquello, y ahora
es ella la letrada conocida y reconocida por su profesión.
Claro que los comienzos no fueron fáciles, “a la gente
le costaba escoger un abogado que no fuese hombre”, lo que unido a la solera de
los abogados ya establecidos le complicó empezar.
Ser mujer, un retraso en el despegue de su
carrera
Con la perspectiva que dan los años Zarco cree ahora
que ser mujer supuso un retraso importante en el despegue de su carretera.
“Convencer a la gente que lo puedes hacer igual o mejor que un hombre en una
época en la que no había muchas mujeres trabajando fuera de casa o desempeñando
trabajos de responsabilidad me costó mucho al principio. Puede parecer una
anécdota pero puedo contar que hacer un viaje a Zaragoza con un cliente, supuso
que el cliente se trajese a su mujer para no ir solo conmigo en el coche. Eso
por supuesto no se planteaba cuando el abogado era hombre”.
{{comentario.contenido}}
"{{comentariohijo.contenido}}"
Jueves, 21 de Noviembre del 2024
Jueves, 21 de Noviembre del 2024
Jueves, 21 de Noviembre del 2024
Jueves, 21 de Noviembre del 2024
Jueves, 21 de Noviembre del 2024
Jueves, 21 de Noviembre del 2024