Pablo Camacho Bolós es un joven tomellosero de 27 años que trabaja en la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología, concretamente, en el departamento de Cultura Científica y la Innovación. A esta prestigiosa entidad, de carácter público, llevó tras superar un exigente concurso-oposición. Antes vivió otra gran experiencia profesional como guionista del programa de Televisión Española, “Órbita Laika” que busca hacer más accesible el mundo de la ciencia al gran público. Un currículum de primer nivel para este bioquímico que, como fácilmente se trasluce en esta entrevista, desempeña su profesión desde una gran vocación. La distancia que impone la conversación telefónica se acorta con la cercanía y amabilidad de Pablo, un ejemplo más de la valía y talento que tanto abunda en la ciudad.
- ¿En qué consiste su función en la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología?
- Estoy en el departamento de Cultura Científica e Innovación que tiene como objetivo principal acercar la ciencia al público, hacerla más accesible y fomentar una cultura de la ciencia. Ofrecemos financiación para proyectos de divulgación científica y en la Fundación también desarrollamos nuestros propios proyectos, además de gestionar una estructura de redes para compartir conocimientos con universidades y otras entidades.
-¿Qué estudios ha cursado?
- Estudié bioquímica, posteriormente hice un máster de oceanografía y gestión de medios marinos y acabé decantándome por todo lo relacionado con la divulgación y comunicación de la ciencia que vi que era una vía estupenda que me permitiría aunar los formatos de ciencia, artes y comunicación en los que me muevo. Mi carrera me daba diversas opciones; tirar por la investigación, trabajar en la industria farmacéutica, la enseñanza y acabé eligiendo la vía de la divulgación y comunicación de la ciencia que, tal y como se ha demostrado en los momentos que vivimos, es algo de vital importancia.
- Se suele asociar la ciencia más a los números que a las letras, pero evidentemente esto no es así y usted lo explica muy bien
-Un gran divulgador de la ciencia como fue Eduardo Punset era abogado. Cualquier rama del conocimiento desemboca en la ciencia. Afortunadamente, las encuestas dicen que la de los científicos es una de las profesionales más valoradas junto a la de los profesores y los médicos, que son profesiones muy interconectadas entre sí y con la propia sociedad.
- ¿Cómo fue su paso por Órbita Laika?
- Participar en un programa de televisión de divulgación científica fue una experiencia muy divertida. Al ser el sector donde me muevo profesionalmente me sentí muy cómodo y tuve el privilegio de trabajar con un equipo multidisciplinar de todas las ramas del conocimiento. Básicamente, el programa usa el humor como herramienta para divulgar la ciencia.
- Divulgar la ciencia en clave de humor parece un planteamiento original y acertado, ¿no cree?
- Sí, es cierto, aunque el humor es una herramienta más entre otras que utilizamos. El programa es más de ciencia que de humor, abordando temas de actualidad y que tiene claro que el principal objetivo es acercar la ciencia a la gente. Ahora se están emitiendo los últimos programas de la temporada y me siento feliz cuando alguien me dice que ha visto el programa.
-¿Se van acortando las distancias entre España y otros países con mayor tradición investigadora?
- Cuando las sociedades avanzan, van mejorando en todos sus sectores. No creo que el mejor sistema de ciencia sea el español, pero en nuestro país se hace buena ciencia, con trabajos y proyectos de mucha calidad.
- La ciencia y la tecnología afectan a múltiples aspectos de nuestras vidas, por no decir a todos. Algo muy visible es que está cambiando sustancialmente la naturaleza de los puestos de trabajo…
- Sí. De hecho una científica, Rosalind Franklin, que fue la primera persona en obtener una fotografía de nuestro ADN, decía que la ciencia y la vida no pueden caminar por separado. La ciencia nos toca siempre y los estamos viendo en estos tiempos de pandemia que se hace muy necesario comunicar los avances que se producen, por ejemplo, con las vacunas. Y hay que hacerlo con empatía, no desde una posición elevada, comunicando la ciencia con mensajes claros, asequibles y consistentes.
- ¿A qué científicos o divulgadores de ciencia admira más?
-Hay muchos y buenos referentes, pero por detrás de ellos hay mucha gente que trabaja. Para mí son referentes todas las personas que trabajan en esto. No solo son las estrellas, sino también toda esa gente a la que no se ve, pero que se deja la piel para llevar este mensaje. Estamos muchos en bambalinas trabajando en esto. Hablábamos antes de Punset que tuvo un programa en televisión que se llamaba “Redes” donde se tocaba la ciencia con un enfoque muy interesante e innovador. Pero claro, no era Punset solo, había gente muy importante detrás que contribuyó al éxito de ese gran espacio.
- ¿Estar en la Fundación colma son sus aspiraciones profesionales?
- Trabajar la Fundación es una meta bastante buena para mí. Además es una entidad pública y yo le doy mucho valor a todo lo público y todavía más a una institución que trabaja en el ámbito de la divulgación científica que es mi sector. Me siento muy a gusto aquí. Luego intento desarrollar también otro tipo de proyectos. En febrero del año pasado estrenamos en un pueblo de Extremadura una obra de teatro que escribí y que trata sobre Rosalind Franklin. Mi ilusión era estrenarla también en Tomelloso, pero vino la pandemia y todo se paralizó. Lo retomaremos cuando se pueda, porque el objetivo era mantener un contacto muy cercano con los asistentes de todos los pueblos donde fuerámos, ya que planeábamos hacer una gira.
- ¿Cómo es su relación con Tomelloso?, ¿viene mucho?, ¿conserva amigos aquí?, ¿sigue las noticias de la ciudad?
-Tanto mi familia paterna como materna son de Tomelloso, tenemos casa ahí y son muchos los lazos. Este año, por las circunstancias conocidas, no he ido todo lo que quisiera, pero trato de ir una vez al mes y no concibo ninguna de mis vacaciones sin pisar Tomelloso. Suelo ser asíduo a celebraciones como la Navidad, la Romería o la Feria. Yo nací en Madrid y hecho más vida aquí, pero mi alma y mi inspiración para muchas cosas que hago están en Tomelloso.
-¿Cuáles son sus principales hobbies o aficiones?
-Mi padre me ha intentado inculcar su afición al golf, pero no lo ha conseguido (risas). Yo soy muy aficionado al mundo del cine, el arte y sobre todo a la cultura pop, de hecho mantengo junto a una amiga un podcast que se llama “Siiii? Quien eees?”, donde abordamos diferentes temas pop desde la curiosidad, el humor y la ciencia.
-¿Cómo ha vivido este duro 2020 de la pandemia del Covid-19?
-Lógicamente mal. Si lo pudiera eliminar, lo eliminaba de forma fulminante. Pero también es cierto que de un año tan negativo se extraen cosas positivas. Creo que lo sucedido ha servido para darnos cuenta lo saturados que estábamos de información, de trabajo, de planes…un momento de ebullición que nos envolvía y del que no nos hemos dado cuenta hasta que hemos parado. Y algo importante, hemos aprendido a ver lo importante que es cuidar.
{{comentario.contenido}}
"{{comentariohijo.contenido}}"
Miércoles, 9 de Julio del 2025
Miércoles, 9 de Julio del 2025
Miércoles, 9 de Julio del 2025
Miércoles, 9 de Julio del 2025