El Villarrobledo y el Badajoz han empatado a cero en un partido de más emoción que juego. El a priori partido más cómodo entre el todopoderoso líder pacense y el colista resultó ser un encuentro plano y sin apenas jugadas peligrosas en las áreas. 

El Badajoz saltó al césped de Villarrobledo con ganas de dominar y encarrilar el encuentro lo antes posible. En los primeros 15 minutos gozó de muchas oportunidades mediante Santamaría y Aquino, a los que les llegaban balones claros, pero la efectividad de la defensa local cortaba las llegadas e impedían actuar a Diego Nieves. En el minuto 13 buena jugada de Santamaría que paraba Nieves sin excesivos problemas.

Tras el cuarto de hora inicial comenzó a aparecer el Villarrobledo por campo visitante. Falta lateral local que botaba Galán y Kiko Royo enviaba a córner. Hasta el ecuador de la primera parte reinó la igualdad y hubo que esperar hasta el 18 para ver a Aquino rematar un centro que volvía a sacar la defensa. El juego se basaba en balones muy forzados fáciles para los zagueros.

En la recta final de la primera parte el Villarrobledo tuvo un par de córners seguidos que no inquietaron al portero visitante. Gorka probó suerte con un disparo lejano en el 39 y un minuto después, la mejor ocasión blanquinegra con una aproximación de Santamaría que bajo palos sacó Bruno Lemiechevski. El Badajoz estaba mejor posicionado, mostrando su nivel ante un Villarrobledo al que le acucia la falta de puntos y las bajas de jugadores.

Dominio infructuoso del Badajoz

En la segunda parte, y sin cambios en ninguno de los dos equipos, la tónica fue la misma que en la primera mitad: el Badajoz dominando y los locales aguantando los envites. En el 52. falta que Concha dispara y para Diego Nieves y al minuto, ocasión de Corredera que tampoco termina en buena lid. Por parte local Galán tuvo alguna falta lateral como la que botara en el 57 y que fue despejada por los defensas sin complicaciones. Las zagas se estaban imponiendo a los ataques y el empate a cero parecía cada vez más candidato a resultado al final del partido.

Fer Estévez comenzó a buscar revulsivos en el banquillo e hizo un doble cambio en el minuto 60. Santamaría y Alayeto dejaron su puesto a Adilson y Tahiru. Velocidad en busca de la espalda de la defensa local y huecos por donde Aquino podría hacer daño. También dejó su puesto el amonestado Cedenilla por un Forgás que siempre aporta al conjunto blanquinegro. Quedarse con un jugador menos en un partido tan parejo podría ser el matiz que diferenciase la victoria de la derrota.

A partir del minuto 70 y hasta el final del partido crearía más el Badajoz y el meta Diego Nieves tuvo que aparecer hasta en tres ocasiones, mostrándose muy seguro como en el resto del encuentro. Entre medias, disparo de Joseca desde fuera del área, lejos, sin peligro para Kike Royo y la réplica en el 89 con una falta a favor del Badajoz que Sergi Maestre no remata.

No daba por perdido el partido el técnico pacense y decidió hacer otro par de sustituciones para intentar lograr ese gol tan buscado en la recta final. Corredera y Aquino, muy cansados, dejaron su puesto a Guzmán Casaseca y Otegui. El propio Guzmán tuvo en el descuento la última ocasión del encuentro en una falta lejana que colgó y paró con seguridad Diego Nieves.

Al final, empate a cero en el partido en el que se esperaba algo más del Badajoz, donde los de Fer Estévez, aunque gozaron de más oportunidades que el Villarrobledo, no pusieron mucho más peligro que el equipo contrario. No hubo mucha diferencia entre el primero y el último clasificado del grupo. El Badajoz se mostró mucho más bloque que el Villarrobledo pero los locales tiraron de casta y su portero, Diego Nieves, actuó cuando tuvo que hacerlo para asegurarse al menos el empate.