“Imágenes de una vida” es el primer libro de poemas de Mila Blanco Peinado. Una mujer de Tomelloso que hace gala de una gran sensibilidad y se confiesa amante del arte desde una formación autodidacta. Mila Blanco va a presentar el poemario el miércoles 21 de abril en el Restaurante Triana. Editado en Círculo Rojo, el libro une los textos de Mila con las fotografías de Adams Guijarro.

Hay ambiente en la plaza de España —guardando, lógicamente, las medidas sanitarias impuestas— se siente la primavera este martes de abril.  Mila me cuenta que está «muy contenta» con “Imágenes de una vida”, el poemario está obteniendo resultados positivos y, lo más importante «a la gente que lo ha leído le gusta». El libro une versos y fotografías, en una perfecta simbiosis, una circunstancia que «agradecen los lectores», asegura la autora.

La obra está dividida en bloques. En la primera parte tiene especial presencia «el amor y, como no, también el desamor». A la siguiente parte la autora la ha llamado Eróticas «con cuatro poemas acompañados de fotografías en las que yo, como en la mayoría del libro, soy la modelo». Arte es el siguiente bloque que inicia con un poema titulado “Música”. La foto que lo ilustra es un guiño a Man Ray; «en esta parte, que es la que más me gusta, hablo de la música, el baile, la escritura y el teatro». La autora cuenta al periodista que ha estado haciendo teatro durante quince años. En Las Mentes, el siguiente epígrafe del poemario, Milagros Blanco habla de «la hipocresía, la envidia, o el orgullo. Todo eso que, por desgracia, está en nuestro interior». Continúa el libro con Sentir «una mezcla de distintos poemas».

“Escribiendo encontré mi libertad”

El verso de uno de los poemas, que la autora ha titulado Libre, dice “Escribiendo encontré mi libertad”, le sirve al periodista para coger el rábano por las hojas y cuestionarle a Mila cómo llega a la escritura y si es ciento que con ella ha encontrado la libertad. «La encontré; hay cosas que digo en el libro, que tenía calladas y el plasmarlas negro sobre blanco me han hecho sentirme más libre». Asegura Mila que llega a la escritura «porque soy muy emocional. Al final del libro he reproducido tres cuadros míos, también pinto al óleo; me emociono mucho con las imágenes. En un momento determinado, esas emociones y sentimientos empezaron a llegar a mi mente en forma de palabras que quise trasladar a la escritura». Y, «sin pensar», esos escritos han formado “Imágenes de una vida” «porque no quería que todo eso se perdiera». Y con los poemas que la autora tenía y otros que compuso específicamente para el libro, surgió el poemario «con el que es muy difícil no sentirse identificado». El libro está editado con primor por Círculo Rojo y ha sido seleccionado para los Premios que otorga la editorial «una circunstancia que me hace sentir más contenta».

Asegura que la poesía cumple su necesidad de expresión porque «soy una persona muy sensible y no me da vergüenza decirlo». Ha tardado más de dos años en ver el libro en la calle «ha sido un trabajo conjunto con el fotógrafo, Adams Guijarro, que ha hecho una gran labor». Mila es de Tomelloso, una ciudad de poetas y artistas, aunque ella confiesa que «voy por libre, soy absolutamente autodidacta, tanto en la escritura como en la pintura».

Con “Imágenes de una vida” Mila Blanco se desnuda ante los lectores y ese ejercicio no ha afectado a la autora, al contrario, «es algo muy grande ver como lo que has escrito llega al corazón de las personas. He visto a dos hombres llorar tras leerlo, algo que me ha emocionado mucho».

Desde enero que salió el poemario Mila ha recibido «opiniones muy positivas de la gente que ha leído el libro. A algunos les ha parecido corto, otras personas me reconocen el los versos del libro». Pero es que, además, “Imágenes de una vida” tiene un importante aspecto solidario ya que una parte del importe de venta va a ir destinado a Afanion, la asociación que lucha contra el cáncer infantil.

Mila Blanco va a presentar el libro el miércoles 21 de abril a las 9 de la noche en el Restaurante Triana de Tomelloso «con muy poco aforo debido a las circunstancias provocadas por la pandemia. Estaremos entre veinte o veinticinco personas».