Así lo ha precisado el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo esta mañana durante su intervención en Ciudad Real, donde ha acompañado al jefe del Ejecutivo regional en la colocación de la primera piedra del inicio de las obras de la tercera fase del pabellón ferial en esta ciudad, lugar en el que se celebra la Feria Nacional del Vino (FENAVIN) y que permitirá ampliar las instalaciones hasta llegar a los 31.000 metros cuadrados.

Martínez Arroyo ha reivindicado el agua en una tierra, ha dicho, “donde el 51 por ciento del viñedo cuenta con riego eficiente”; en una Comunidad Autónoma, “la más puntera de España en riego por goteo”, en la que el 62 por ciento de su superficie útil regable lo hace a través de este sistema.

El consejero se ha referido también a que hay que reivindicar este recurso, “el más importante, que es el agua, como hace el presidente de la región, pensando en los intereses de Castilla-La Mancha por delante de cualquier otro”.

Así, ha recordado que en la cuenca del Guadiana se verá en breve la llegada de agua a las Tablas de Daimiel, gracias a un “acuerdo político” entre el Gobierno de Castilla-La Mancha y el Gobierno de España. Serán seis hectómetros cúbicos para encharcar 1.000 hectáreas de esta parte nacional y, para ello, se usará la Tubería a la Llanura Manchega, una infraestructura que costó 350 millones de euros públicos. Con esta actuación se probará para su posterior puesta en marcha con el objetivo de que llegue agua para consumo humano a 80.000 ciudadanos. 

Además, el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha recordado que, a partir de 2023, el Gobierno regional va a poner en marcha una ayuda específica para el viñedo de secano, para esas cepas antiguas que han pasado de generación en generación, y del que se producen vinos excepcionales, vinos de autor. Para ello, se van a dedicar un total de 26 millones de euros, ha finalizado.