Las Palmas de Gran Canaria fue tierra prometida para Eugenio Madrigal. El nadador tomellosero de 26 años, enrolado en el C.N. Cuatro Caminos, cosechó cuatro medallas, batió un récord de España y estuvo a un gran nivel. Madrigal  demuestra su gran clase y gen competitivo allá donde le toca nadar y las Islas Canarias no fueron una excepción. En esta entrevista, Eugenio nos descubre su pasión por la natación, su deseo de mejorar siempre y el sacrificio que le supone compaginar su trabajo de ingeniero aeronáutico con el deporte.

-En Las Palmas estuvo fantástico, colgándose cuatro medallas nada más y nada menos…

-La verdad es que salieron las cosas bastante bien: en 100 braza, categoría +25 logré el bronce; en el relevo 4 x 100 estilos mixto, categoría +120, nos llevamos la plata y los dos oros que fueron en 50 metros braza y en el relevo estilos, categoría +100, donde además conseguimos el record de España. 

-¿Esperaba dar ese nivel en el campeonato?

-Iba con el objetivo de realizar mejores marcas de las que finalmente he hecho. Pero los campeonatos de verano son en piscinas de 50 metros y ahí suele bajar mi rendimiento. Me desenvuelvo mucho mejor en piscinas de 25 metros que es donde se realizan los campeonatos de invierno.

-¿En qué prueba se siente más a gusto?

-En 50 metros braza. Es la que más preparo, donde más compito y en la que más a gusto me siento.  El poco tiempo que me permite el trabajo para entrenar los enfoco con entrenamientos cortos y explosivos para rendir bien en esta prueba.

-¿Hasta dónde puede llegar Eugenio Madrigal  en el mundo de la natación?

-Lo primero de todo es que no esperaba seguir tanto tiempo en este deporte. Viendo las marcas que he ido haciendo, todavía me veo con mucho margen de mejora, pero no puedo entrenar todo lo que me gustaría. Primero con la vida académica y ahora con la vida laboral resultado complicado sacar tiempo.

-Trabaja de ingeniero aeronáutico…

-Sí, y quizá ahora me resulta más fácil nadar porque tengo más tiempo que cuando estudiaba y puedo ser más constante en los entrenamientos. Diariamente le puedo dedicar un mínimo de hora y media y un máximo de tres. Voy compaginando piscina y gimnasio.

-¿Qué competiciones va a preparar próximamente?

-Voy a preparar el Campeonato de Europa, que es lo único que falta para finalizar la temporada. Espero poder rebajar marca en los 50 braza.

-¿Se encuentra a gusto en su club, el C.N. Cuatro Caminos?

-Sí. Llevo solo esta temporada con ellos. Conocía a algunos integrantes, me dijeron que me uniera a ellos y empecé a entrenar. Siempre son más motivantes y llevaderos los entrenamientos en equipo, aunque muchas veces he tenido que seguir entrenando solo por el tema de los horarios. Ellos terminaban de entrenar a las once  de la noche y no me venía bien porque a las 6 de la mañana tengo que estar en mi trabajo. Pero bueno, siempre que puedo estoy con ellos, son gente que viven la natación con mucha pasión. Son unos enfermos de la piscina, igual que lo he sido yo desde pequeño. El club tiene un ambiente espectacular y con mis compañeros he podido experimentar la sensación de nadar unos relevos en un campeonato de España.

-¿Mantiene lazos y contactos con los que eran sus compañeros en Tomelloso?

-Sí claro. Con la gente que sigue nadando y también con los que lo han ido dejando. Han sido muchos años nadando con ellos. Hablo mucho con Victoria Mezcua que también ha realizado un gran campeonato de España. En Las Palmas me encontré a otros y la verdad es que tengo buenos amigos dentro y fuera de la piscina. 

-Recordará también a monitores y entrenadores…

-Tengo que dar las gracias a Mario Sánchez que ha sido mi entrenador durante muchos años y, de hecho, él me sigue asesorando y programando entrenamientos. Mario y mi familia son los dos grandes apoyos que tengo.