Ángel Luis fue  pasión por el deporte, especialmente, el fútbol. Formado en el Tomelloso OJE de los setenta, demostraría después  su clase como interior zurdo en el Miguel Esteban, Tomelloso C.F., Cervantes, San Lorenzo de Zaragoza, San Clemente, también en el fútbol-sala con aquel Sanalcón de sus amigos de toda la vida que se llevó el primer maratón celebrado en Tomelloso.  En la retina de la memoria quedará ese espectacular gol a La Roda desde campo propio defiendo los colores del San Clemente y esa elegante forma de jugar.

Como practicante su otro gran deporte sería el tenis. Fueron inolvidables aquellos duelos con Tomasito Galán en el poli. También tuvo una incursión en la caza y el tiro al plato, afición que le vino de su padre y que llevó a ser el seguidor más fiel del tirador olímpico, Jesús Serrano.  Más adelante ejercería como árbitro de billar, deporte que también practicó y juez atletismo. 

Gran amante de los animales y de las plantas, determinó seguir viviendo en la  casa de la calle Santa Rita  donde Pilar, su madre, cuidó con mimo un espectacular patio de estilo cordobés. Allí derrochó cariño, sentido del humor y apego a la familia en aquellos veranos de reuniones familiares y veladas con amigos a la sombra de la parra.

Y junto con el deporte, la música. Tocó la bandurria en el grupo de Coros y Danzas Virgen de las Viñas, en la primera época de Alfonso Cuesta, y pudo disfrutar aquellos inolvidables viajes a Bélgica y Jaca que le reportaron amigos para siempre. Y más recientemente se implicó de lleno en la Coral del Conservatorio de Música en la que encontró otra gran familia.  

Pasión por el deporte, la música, en realidad por la vida misma: salir de compras, viajar, empaparse de la prensa y los libros, disfrutar las ferias y fiestas barrios, de la fotografía, de la familia y de sus amigos. Su jubilación era un momento idóneo para dar rienda suelta a muchos proyectos que aún le quedaban por desarrollar. 

Su marcha nos deja desolados, pero me lo quiero imaginar en ese equipo eterno de allá arriba que forman los Úbeda, Carlos Moya, Rodri, Miguel Moreno, Agustín, Ricardo… con Gálvez en la banda y Nicolás haciendo las gestiones directivas. Las glorias de su admirado Athletic Club también echarán una mano a un once al que será  complicado doblegar.

Que la tierra te sea leve, Ángel Luis, hermano del alma.