La Guardia Civil de Manzanares, inició la investigación de un hurto de unos cien aspersores en una explotación agrícola sin cercar del término municipal de Bolaños de Calatrava, fácilmente reconocibles por sus propietarios debido a las características de los mismos. El hecho había tenido lugar en un horario muy concreto entre las 13:00 y las 16:00 horas. 

A raíz de este hecho, se suceden una serie de delitos con el mismo modus operandi, material sustraído, mismos lugares y horarios de comisión.

Creándose una gran alarma social entre los propietarios de las explotaciones agrícolas por la sensación de inseguridad, debido a que son fincas agrícolas que se encuentran aisladas o bien en los extrarradios de poblaciones cercanas, y el horario de la comisión era mayoritariamente cuando estaban ausentes en la hora de la comida. 

Tras realizar diversas gestiones con empresas recuperadoras de metales, se procede a la explotación de la Operación Periquitox, dando como resultado la detención de cuatro personas (dos varones y sus parejas sentimentales) como autores de 21 delitos contra el patrimonio.