No le cogió el pulso al partido el Atlético Tomelloso en un primer tiempo muy flojo. Los de Sepulveda apenas inquietaron la meta de un  Pedraza que vivió plácidamente, sin sobresaltos. El balón apenas transitó por el medio, costó un mundo asociarse y las ocasiones de gol brillaron por su ausencia.

Más sensación de peligro ofreció siempre un Torrijos que llegó con muchos efectivos arriba y se mostró más aguerrido en la pelea por las segundas jugadas. Vicente hizo daño por la derecha y el mismo futbolista tuvo una clarisima oportunidad en el 24 que Montreal sacó in extremis con el pie y después el balón pegó en el palo. Sí encontró el gol el Torrijos en una desafortunada salida de Monreal que no despejó con contundencia y la pelota suelta quedó franca para Vicente que tiró y provocó que Yeisson evitará el tanto con la mano. Expulsión y pena máxima que Jorge aprovechó para poner el  0-1. Fue la última jugada del primer tiempo y el partido se ponía muy cuesta arriba para los auriverdes.

 Dos centros de Bonilla que bloco el meta toledano y un remate de cabeza de Pumareta que se marcho por encima del larguero fue el escaso bagaje ofensivo del Atlético en los primeros cuarenta y cinco minutos. Con la expulsión, Sepúlveda recompuso el equipo dando entrada a Agustín en lugar de Pumareta. 

Pero lo imprevisible volvió a suceder. En el primer minuto de la segunda parte, Marco fue objeto de un claro penalti que Loren Molinero transformó con seguridad. Y solo siete minutos después llegó el segundo, en una jugada en la que David Sevilla, con mucha inteligencia, vio que era mucho mejor tirar que centrar ante el hueco que le dejaba el portero. Con ventaja, se acomodaron los auriverdes en un 1-4-4-1, con repliegue intensivo y líneas juntas  para efectuar las ayudas. Pero táctica aparte, cabe destacar la actitud de todos. Se empezaron a multiplicar en el trabajo hombres como Marco, David Sevilla, Lobato, Joaquín…Ofreció mejores prestaciones Loren Molinero como central y el equipo vio que la victoria era posible. 

Antes  hubo que contrarrestar los ataques de un Torrijos que generó dos clarísimas ocasiones de gol, pero Monreal respondió con dos impresionantes paradas, que borraron su error anterior en una salida de balón con el pie que entregó a un rival y que a punto estuvo de ser gol. Joaquín, a pesar del cansancio, aguantaba los balones arriba.  Fue oxigenando el equipo Sepúlveda con los cambios y al final los puntos se quedaron en casa.  Cinco puntos sobre doce posibles no es mal balance en el primer mes de competición.