“Siempre ha habido agresiones, pero desde el Covid se dan con más frecuencia, la gente es más exigente con la sanidad. Pedimos al Sescam que adopten medidas más efectivas para prevenir y proteger a los profesionales, sería interesante una investigación interna para detectar lugares más conflictivos o puntos calientes y actuar en consecuencia, algo que ahora no pasa”, asegura Óscar Quintana, vicesecretario del CESM en Ciudad Real.

Quintana y otros profesionales se han concentrado este lunes en el consultorio de Torralba en apoyo de Kiara, la médica colombiana insultada y vejada con comentarios xenófobos por una paciente el pasado 16 de febrero, según la denuncia de la doctora.

“No hay perfil, esto le pasa a cualquiera”

“Cada vez que hay una agresión el sindicato médico está con los compañeros”, dice Quintana. El representante sindical afirma que no existe perfil ni del paciente que agrede ni del profesional que recibe la agresión, “le pasa a cualquier compañero, tanto en centros de salud como en hospitales, consultorios o visitas a domicilio, y esto no se puede tolerar. A cualquier trabajador le gusta trabajar en un buen ambiente laboral, sin sufrir estrés o ansiedad por recibir a gente”.

La primera agresión a médicos de este año en Ciudad Real

La agresión de Torralba de Calatrava es la primera denunciada en lo que va de año. 2023 fue un mal año, con agresiones graves en Bolaños, Almagro y Tomelloso. “Cada vez que hay un ataque estamos para el compañero o compañera se sienta arropado”.

“Tenemos que prevenir mucho más para evitar este tipo de situaciones, no concebimos un ambiente laboral en el que esté presente el insulto, la descalificación, el intento de humillación o cualquier tipo de agresión física, verbal o psicológica”, dicen. El consultorio de Torralba de Calatrava es un centro pequeñito en el que trabaja una administrativa, dos médicos, dos enfermeras y una pediatra a media jornada que atiende en Carrión, a cuyo centro de salud está adscrito el equipo. Dependen de la gerencia integrada de atención primaria de Ciudad Real.

También reclaman al Sescam que se persone como acusación particular ante agresiones en las que se ponga en riesgo la vida de sus trabajadores.