Antes del inicio de la obra, el director, Miguel Ángel Berlanga, contó a los espectadores los entresijos de la preparación de la obra, expresando su deseo de agradar. Y lo consiguió con creces el laureado grupo de Tomelloso con una cuidada adaptación de la obra de Josep M.Benet, un texto con temática íntima y existencial, de psicologías atormentadas, que mantiene la atención del espectador durante la hora y cuarto que dura la función. 

Los tres actores  evolucionan a lo largo de la obra y expresan magistralmente el contraste de una vida que parece feliz a otra en la que todo se derrumba a raíz de un inesperado accidente. Y en esta evolución brilla con luz propia una magnífica Mercedes González a la que no se le resiste ningún registro de interpretación. Excelente también Ángel Berzosa en ese papel de padre que no acepta la pérdida  de su hijo y que da vida a un personaje con dos caras opuestas y gran trabajo también de Saúl que lejos de intimidarse por actuar en una obra de cierta complejidad y ante un teatro lleno, se crece y dice en voz alta que aquí hay un actor de futuro. 

Avanza la trama y el desenlace de la obra se va viendo venir y  con ese final tan bien recreado en el que la habitación se va quedando vacía, lo mismo que la vida de los personajes. Al término de la representación el público premió a los actores con un prolongado aplauso, extendido también a  Graciela Berlanga y Miguel Ángel Perales (figuración), Lola Blanco, Pedro García y Montse Quevedo ((iluminación  y sonido), Rafa Rodrigo MeOne y Fundación Cadisla(Escenografía), Anabel Corral (fotografía), David Mansilla y José Manuel Espinosa (vídeo) y por su puesto al director y creador de la adaptación, Miguel Ángel Berlanga, que nos sigue obsequiando con bellísimas representaciones.

La Muestra continuará el próximo fin de semana, con doble función, el viernes y el sábado y después de este gran comienzo el público tiene que seguir acudiendo al Marcelo Grande para disfrutar del talento de unos actores que, siendo aficionados y a base de un sacrificado trabajo, muchas veces se acercan a los niveles de un profesional.