Esta crónica empieza por ese emocionante final en el que los de Gaspar Martín se salieron con la suya. Antes, parecía que no habría que dar a lugar a esos sobresaltos finales porque los locales llegaron a conseguir una diferencia de 20 puntos. Pera a base de pico y pala, Mota fue reduciendo diferencias. Al término del tercer cuarto, un 56-51 en el electrónico avisa que habrá que sufrir, que no se podrá ganar de la forma holgada que se podía pensar. 

El partido es de alto voltaje, pegan un estirón los de casa hasta irse de diez, esa frontera psicológica en un deporte como el baloncesto. Pero no se rinde Motga que logra ponerse uno abajo en el partido, 68-67, pero por delante en la eliminatoria. Es la hora de los valientes y ahí se distingue Alonso que sigue superando pruebas de fuego en su formación de jugador.  Su triple más uno siempre será recordado.

Pero en la victoria ha habido más argumentos, el gran trabajo de Cris, las penetraciones de Araujo, la experiencia de hombres como Bonillo o Jaime a la hora de tomar decisiones, la aportación del técnico, Gáspar, en los minutos que sale a la cancha, el ritmo y calidad que meten hombres como Javi Bonillo o Muñoz en cada una de sus intervenciones.

Al final, victoria. Otro éxito de un club donde los resultados demuestran el gran trabajo de todos sus estamentos: directiva, técnicos, jugadores, afición, padres...Todos suman y los buenos resultados siguen llegando. Al final del encuentro un emocionado Gaspar Martín señalaba que "el objetivo del equipo ya está cumplido. Ahora vamos a esa final a cuatro a divertirnos y disfrutar de un momento como ese. No me sorprende en absoluto lo de Alonso, lleva ya dos años en el primer equipo y sabemos que va  a ser un jugadorazo".