Aunque Almajamer nació en el año 2016, hay que retroceder mucho más en el tiempo para situar los orígenes de esta empresa familiar de Argamasilla de Alba.  La pasión por el campo empezó con los dos abuelo de los actuales propietarios, “agricultores de toda la vida”, el siguiente eslabón sería Manuel Carmona, un amante empedernido del campo que todavía sigue en la brecha y ahora son sus hijos Jaime, Alberto y Manolo los que tiran del carro de una empresa que en estos momentos emplea a 120 trabajadores.

Jaime Carmona atiende al periodista de La Voz en una de las naves que han adquirido recientemente, justo al lado del recinto ferial y con recolecciones en su pleno apogeo como la recogida de cebolla. “Nosotros criamos el producto y se lo servimos preparado a varias empresas para el posterior triturado y congelado. Son  empresas importantes como Congelados Navarra y otras de gran tamaño a las que servimos producto”.

Almajamer ha apostado por una agricultura muy diversificada que cultiva todo lo que se puede críar en la zona: melón, sandía, cebolla, ajo, coliflor, brócoli, pimiento tomate, calabaza, olivar y almendro, entre otros productos. Normalmente emplean a cien personas que en verano son más “sobre todo cuando empieza la recolección del melón, la sandía, el pimiento o el tomate que suelen coincidir en el tiempo. No es fácil llevar a tantas personas, pero ahí estamos”.

Analizando la actual coyuntura del campo, Jaime Carmona, asegura que “venimos de dos años bastante buenos porque el hecho de no haber agua en Andalucía nos ha beneficiado a nosotros puesto que cuando no hay agua se planta menos. Este año la campaña del ajo ha arrancado muy bien, pero los precios de la cebolla están muy bajos, por debajo de los costes de producción. Pero bueno, nunca se sabe cómo evolucionan las cosas en el campo y a lo mejor cuando se gaste la cebolla que hay temprana, los precios remontan. Pero lo mejor es arrancar bien de inicio”.

Pero la mala situación de un producto se puede compensar con las mejores circunstancias de otro. “Es la ventaja de una agricultura diversificada y por este motivo tocamos tantos productos. Dedicarse solo a un producto supone un riesgo evidente. Criar los productos tiene un coste muy elevado y si te vienen dos años malos lo puedes pasar francamente mal”.

Toca hablar de la competencia de esos países emergentes en agricultura como Marruecos y otros que lo ponen difícil. “Aquí nos exigen mucho; no se pueden echar pesticidas y otras muchas cosas para controlar enfermedades y no sabemos lo que hacen en esos países. Se supone que llegará un momento en el que se valorará más nuestro producto que el de fuera. Sobre nuestro producto la transparencia en cuanto a trazabilidad e información es máxima”.

Almajamer se ha distinguido también por su gran apoyo al deporte, algo de lo que Jaime Carmona se siente especialmente orgulloso. “El deporte me encanta e intento echar una mano en lo que puedo. Al final, el deporte es salud y son hábitos de vida saludables entre los jóvenes. El deporte es muy beneficioso para la sociedad”.

Precisamente, Almajamer será protagonista este fin de semana con el torneo de fútbol-7 que lleva su nombre y que se disputará el 28,29 y 30 de junio en el campo Santiago García de Argamasilla de Alba. “Es un torneo en el que hemos puesto mucha ilusión, contaremos con 9 equipos cadetes y 12 juveniles y más de trescientos chavales participando. La organización la lleva el Atlético Cervantino y vendrán también algunos equipos de fuera. Estamos convencidos de que se podrá ver un buen espectáculo”.