En esta ocasión, se trataba era  de salir de Tomelloso hacia Toledo, desayunar  cerca de la catedral y después partir para Madrid comer en Sol(el klm 0) y después partir para tomelloso. Todo en el mismo día, con 430 kilómetro y un desnivel positivo de  2400.

Partió de Tomelloso a las 4 de la mañana, junto a Gustavo, un participante del último Tour de la Mancha. Sobre las 10 de la mañana llegaban a los pies de la estatua del probablemente el mejor escalador de la Historia que está en Toledo, Federico Martín Bahamontes. Después, los dos ciclistas tomaron rumbo hacia Madrid, con el calor apretando, circunstancia que obligó a realizar varias paradas.

Llegaron a Fuenlabrada y allí les esperaba Luis Miguel,  un ciclista de Madrid que conoce bien la zona y supo guiarlos para llegar a la puerta el sol, el kilómetro cero.

Después tocaba el regreso y eso fue lo más duro, tal y como explica Morcillo. "Fueron 190 kilómetros con el aire ardiendo de cara y una temperatura  de 42 grados. Luis Miguel enos acompaño hasta San Martín de la vega. Y después continuamos Gustavo y yo  hasta Chinchón, hasta que el  cuerpo de mi compañero de viaje dijo basta". Pero estoy orgullosísimo de él porque tuvo decisión de acompañarme  310 kilómetros. Mil gracias para él".

Morcillo continuó en solitario, muy cansado, pero convencido de que lo lograria. Y al final después de más 17 horas de bici y cerca de las 11:45  de la noche logró llegar a Tomelloso, extenuado pero ...emocionado de superar un reto que "no creo que vuelva a repetir".