La actividad tuvo buena respuesta por parte del público, llenándose la primera planta de la Posada. Niños y adultos pusieron a prueba sus capacidades sensoriales a través de un divertido juego de percepción que simulaba los concursos de catadores. La cata contó con la presencia de la teniente de alcalde, Eloísa Perales.

Se plantearon pruebas con cinco tipos distintos de tortas de mosto de los obradores locales y chocolates con distintos porcentajes de cacao y contenido en azúcar, por ser un buen complemento a las tortas de mosto. La cata se realizó separando ambos productos, para no distorsionar las cualidades de cada uno. Al final se pudo realizar una degustación conjunta, acompañada de mosto para los más pequeños y de otra bebida derivada del mosto para los adultos, que es la mistela.

A los ganadores del juego se les entregó una botella de mosto para la mejor puntuación infantil y una botella de mistela para la mejor puntuación de los adultos.

Los ganadores fueron: Claudia Ruíz Gallego, de 8 años y Elena Calderón Muñoz en la categoría de adultos.

Antes de comenzar se dio una charla sobre el uso histórico del mosto, sus propiedades y sobre aquellos productos de la actualidad, en los que podemos ver incorporado, nuestro más preciado jugo.