Después de muchos años leyendo, estudiando, aprendiendo y descubriendo, hoy en mi última etapa vital tengo la sensación de que he perdido el tiempo entretenido en aprender y formarme. He descubierto que para ser líder basta con tener muchísimo dinero aunque no llegases a aprobar la Educación Primaria u obtuviese su graduación por artes nada claras. Es cierto que soy exagerado, ¿verdad?, pero no exagero más, que en las estupideces que se ponen en las redes para que los ciudadanos voten al peor candidato, al mas torpe, inmoral e “inmortal” candidato. Tenemos que revisar los libros de ciencia política y tirar algunos tratados que se han quedado obsoletos. Ni Rousseau ni Maquiavelo, ni el Infante don Juan Manuel, tienen vigencia en un mundo bastante perdido.

Han averiguado que estoy pensando en Donald Trump. ¿Verdad? Efectivamente en él pienso y quiero decirles lo que pienso, aún sabiendo que este artículo lo van a leer el 0,0000001% de los  ciudadanos que le han votado y defienden sus tesis, es decir ninguno.

Me pregunto. ¿Habrá otra manera más estúpida y soez de reírse del mundo que la que usa este ciudadano de América del Norte? Seguro que no. Pero no se lo pierdan, se ha aliado a uno de los mas poderosos empresarios del planeta que controla la Inteligencia Artificial, que quiere crear una compañía de transporte regular a la Luna, coches que vuelen y otras lindeces y aventuras tecnológicas, para ambos dos, juntos, entrar en una nueva era de la civilización en un proceso delirante sin precedentes. Nerón era un mero aprendiz de tanta estulticia y desgobierno al lado de este multimillonario presidente elegido y próximo a tomar posesión de uno de los países mas poderoso e influyentes del planeta.

Me resulta increíble no por lo que dice este loco visionario, sino por el pábulo que algunos le dan a sus bravuconadas. No es de recibo que diga abiertamente, antes de ejercer la presidencia, que va anexionarse el Canal de Panamá, que va a forzar a Canadá para una fusión de países a su conveniencia, que va a quitar los aerogeneradores y los va a cambiar por centrales de combustibles fósiles o que le va a cambiar el nombre al golfo de Méjico. ¿No les parece que esto es increíble? Me preocupan más los ciudadanos que le han votado que él mismo, y sus estupideces. Es evidente que el sistema social mundial está a punto de colapsar, que estamos entrando en una etapa de alta peligrosidad.

Con respecto a ese tipo excéntrico y millonario que se llama Elon Musk pienso que no es humano ¿…? Déjenme decirles que me parece un ser trans-humano creado por una IA en una factoría perdida en las Montañas Rocosas a manos de un sabio loco y perverso como los que habitan en los viejos comics que leía en mi infancia. No se rían, la cosa cumple todas las características de este sueño.

Para apagar un fuego a veces hay que provocar otro. Me explico, ahora la comunidad internacional vive y respira entrecortada antes los desastres de las guerras de Ucrania y Palestina, pero me da la sensación que en este juego malvado parece que para terminar con un desastre hay que provocar otro mayor. ¿Será esta la estrategia de estos visionarios locos? Piénsenlo un momento. Un clavo en el pie se saca con otro clavo. Me pregunto. ¿Qué algoritmo es el que usa este equipo de iluminados para diseñar estas políticas y provocar estos cataclismos que rayan en lo apocalíptico? O, será que todo forma parte de un plan de la IA para restaurar el orden planetario. Nada es predecible en este asunto.

“El juez condena a Trump a ser el primer presidente delincuente, pero le deja sin pena”. (Los Ángeles Time 11 de enero de 2025)

La sentencia por los 34 delitos del ‘caso Stormy Daniels’ no implica cárcel ni multa, pero sí un estigma histórico sin precedentes a solo 10 días de volver a la Casa Blanca. Esto es lo que publicaba el periódico el País en su edición de 10 de enero de 2025 relacionado con la sentencia emitida por el juez de Manhattan Juan M. Merchán.

Cómo es posible que unos días antes de ser nombrado presidente un juez le declare culpable de un delito de blanqueo de dinero. Un dinero que pagó a una mujer para hacerla callar por sus tropelías sexuales. ¿De que hablamos? Nosotros aquí en España nos entretenemos con pequeños juegos e intrigas entre políticos corruptos, jueces y magistrados comprados y separatismos mientras allá en la tierra de la estatua de la Libertad se están sentando las bases de lo que los críticos ya han calificado del “Nuevo Trumpiverso”, esto  es lo que pueden leer en la revista Forbes en el artículo titulado El nuevo Trumpiverso: Multimillonarios y líderes clave en la administración de Trump firmado por Jhon Hyatt el 10 de noviembre de 2024. En el mencionado artículo se escriben los nombres de la nueva “cúpula del trueno” que gobernará los designios del mundo si lo permite el resto de países: Elonk Musk (dueño de Tesla y fundador de SpaceX), Howard Lutnick (millonario), John Paulson (millonario que quiere recortar gastos públicos), Linda McMahon (millonaria, fundadora del América First Policy Institute dedicado a hacer realidad los sueños de grandeza de Tump llevando en su propio nombre institucional, la famosa fase del flamante nuevo presidente “America First” y que según algunos expertos es la  “discreta máquina de combate de nuevo presidente”, etcétera…Siendo esta una “engrasada maquina” para acabar con las disidencias y los afanes de idealistas, que inútilmente quieren poner cerco a una agresiva política que oculta su disfraz neoliberal, acogida a paradigmas como el populismo, proteccionismo y el librecambismo. Trump se enroca en un “negacionismo perverso” que pone en riesgo la estabilidad del planeta en todos los aspectos: salud, medio ambiente, economía, comercio, etc. 

Para los europeos pintan malos augurios bajo el mandato de Donald Trump. El personaje no se ha cortado un pelo en decir que el gas que ha de quemarse en Europa debe venir de EE.UU. (apunto que ya lo estamos comprando y bien caro a los “americanos”), censura las políticas de las moribundas socialdemocracias y alienta los nacionalismos de ultraderecha de la tal Meloni a la que se abraza para que le entregue “la llave de Europa”.

Por otra parte el “señor de los anillos” de este psicodrama, Elon Musk mira con ojos de enamorado a los partidos ultraderechistas alemanes encabezados por Alice Weidel que posiblemente guardan en sus almacenes los estandartes del Reich con la ilusión de traer de nuevo a la vida las nefastas políticas del nacismo. Esto lo dice, este multimillonario que se asoma a la política con ese rostro impenetrable y cínico de niño juguetón.
Me pregunto. ¿Estoy soñando o estoy despierto? No sé qué pensar. Estamos siendo tratados como conejillos de indias y nos llevan a todos a la “caverna de Platón” para que nos entendamos con las sombras de la realidad para que nos convirtamos en meros autómatas descerebrados. Sigo  preguntándome. ¿Qué hay de las viejas tesis de la democracia y la libertad por las que murieron en la segunda guerra mundial entre 55 y 60 millones de personas? ¿Cuántos muertos hay que contabilizar ahora, a juicio del nuevo Presidente, en Gaza y Ucrania para que se detenga la guerra?

Ahora, definitivamente caminamos hacia el absurdo, pero no un absurdo de carcajadas, sino a un absurdo de desgobierno y dolor para los mas débiles. El absurdo ahora forma parte de la geoestrategia, el absurdo ahora es un parámetro para aprobar las lindezas de estos visionarios que han plantado su “culo” en un planeta que ya no puede más, en una civilización que necesita más que nunca cordura, solidaridad y ética. ¿Qué podemos esperar? ¿Quién va a salvarnos de esta debacle?

Algunos culpan a la tecnología, a Internet, a las Redes Sociales, a la Robótica, a la Astrofísica y hasta a la Física Cuántica de estos desmanes, pero no es cierto que la ciencia y la tecnología tengan la culpa, todo lo contrario, serán estas las que nos tendrán que salvar con vacunas contra las epidemias, desertización, agotamiento de recursos y agresiones al medio ambiente. No se equivoquen, ¡por favor!, la tecnología no es culpable, son los hombres y mujeres que la utilizan para conseguir sus groseras aspiraciones. Lo que me preocupa son los millones de votos que han dado los ciudadanos norteamericanos a un presidente “mesiánico” que ha prometido poner patas arriba el planeta. Los que me preocupan son los Putin, los Benjamín Netanyahu y los Zelenski  que firman cada día en sus despachos las sentencias de muerte de miles de seres humanos.

El mundo se derrumba por la incompetencia de estos personajes a los que hemos enriquecido con nuestra propia sangre. Aún quedan por ahí románticos que hablan de derechas e izquierdas de ultras y de nacionalistas. Estos son pensamientos trasnochados, jugadores que ya no intervienen en el tablero de ajedrez de la política. Aquello de los tres poderes, legislativo ejecutivo y judicial, ya se ha acabado. Libertad, Igualdad y  Fraternidad son lejanas palabras de mujeres y hombres que aún creían en el ser humano. Ahora, lo digo con tristeza y mucha pena, estamos gobernados por personajes absurdos y esperpénticos, robots construidos  por mentes enfermas.

NOTA:
Le he pedido a la IA generativa Copilot que me genere dos imágenes para ilustrar este artículo. Esto es lo que le he pedido:

Pregunta a Copilot:

“He escrito un artículo sobre política internacional basado en el perfil del próximo presidente Donald Trump y el equipo que está configurando destinado significativamente Elon Musk. Comentado así mismo algunas de las cuestiones que Trump propone en materia de política exterior y economía. Recurro a ti para que me ayudes con dos ilustraciones para acompañar mi artículo.”

Después de intercambiar unas frases en las que le muestro mi frustración a la IA termina diciéndome:

Respuesta de Copilot:

Entiendo tu frustración. Parece que en este momento no puedo generar las imágenes que necesitas, lo cual lamento mucho. Estoy aquí para ayudarte con cualquier otra cosa que necesites para tu artículo”.

Copilot se ha negado a crearme imágenes y me da escusas técnicas…. Piénsenlo…

No conforme con la respuesta de Copilot he recurrido a ChatGPT con parecida pregunta y aquí está el resultado.

Pregunta a ChatGPT:

He escrito un artículo sobre la nueva era Trump que estamos a punto de comenzar en el mundo. Quiero añadir dos imágenes a mi artículo que represente de alguna manera los nuevos paradigmas de eta nueva era dado que por las declaraciones que ha hecho el propio Trump y algunos de sus colaboradores como Elon Musk.

………

Respuesta de Chat GPT:

“No he podido generar las imágenes debido a restricciones relacionadas con la política de contenido. Esto ocurre porque las representaciones propuestas incluyen elementos sensibles o interpretaciones específicas de figuras públicas que no cumplen con dichas políticas.

Si deseas, podemos ajustar las ideas o explorar enfoques más simbólicos y generales para reflejar los temas de tu artículo sin involucrar representaciones directas de personas específicas. ¿Te gustaría que intentemos algo diferente?”

Solo ha sido un experimento para demostrar como se filtran y observan con mucha atención nuestras peticiones a la IA. ¿Se imaginan si les doy como referencia el propio artículo que he escrito lo que me contestarían?

Cambié mi petición para finalmente obtener las imágenes con Copilot y me generó las que he puesto en el artículo.

Y para terminar, repito de nuevo, la tecnología y la ciencia no tienen la culpa.