Con buena respuesta del público, la sala Beat Wines acogía
este pasado jueves un acto reivindicativo con motivo del Día de la Visibilidad
Trans. Un evento organizado por Aire LGTBIQ+, que también sirvió como puesta de
largo de la nueva entidad ante la sociedad tomellosera.
Así, Aire LGTBIQ+ dio a conocer sus objetivos y su junta
directiva y se dio lectura a un manifiesto reivindicativo con motivo del Día de
la Visibilidad Trans. Dentro del colectivo LGTBIQ+, explicaron, las personas
trans son las que más discriminación siguen sufriendo. El poeta Dionisio Cañas
intervino con la lectura de unos versos de su libro “La balada del hombre mujer”.
Antes del acto conversamos con Raúl Zatón y José Antonio
Jiménez, presidente y secretario, respectivamente, para conocer más sobre este
nuevo colectivo que nace con el objetivo de dar visibilidad, unir y proteger a
la comunidad LGTBIQ+ de Tomelloso y sus alrededores.
—¿Por qué surge AIRE LGTBIQ+? ¿Realmente es necesario un
colectivo así en Tomelloso?
— Creemos que es fundamental. Nuestro objetivo principal es
visibilizar y unir a la comunidad LGTBIQ+, porque la desinformación sigue
siendo un problema y la desunión dentro del propio colectivo también. Es
esencial que tengamos un espacio de apoyo mutuo, de enseñanza y de
reivindicación. Lamentablemente, a pesar de los avances, seguimos viendo
intentos de invisibilización, y nuestra asociación nace precisamente para
evitar que eso ocurra. Estamos para que se nos vea, se nos escuche, para que se
nos entienda y para que se sienta que somos uno más de la sociedad del mundo.
—¿Cuándo decidieron crear la asociación?
—Nace de una manera, triste, podemos decir, pero bien está
lo que bien acaba. Para la lectura del manifiesto LGTBIQ+ del año pasado en
Tomelloso tuvimos que depender de asociaciones de fuera —a las que agradecemos
que lo hiciesen— porque aquí no había un colectivo que pudiera organizarlo. Eso
nos hizo darnos cuenta de que algo fallaba. ¿Cómo puede ser que en una ciudad
de casi 40.000 habitantes no haya una organización que represente al colectivo?
Y cuando se celebró la lectura, ¿quiénes estaban allí? Mayoritariamente gente
de otras localidades. Eso nos confirmó la urgencia de crear AIRE LGTBIQ+.
—Algunas personas ven este tipo de iniciativas como una
reivindicación que busca imponerse sobre los demás. ¿Es eso cierto?
—No buscamos imponernos sobre nadie. Lo señala claramente
nuestra Constitución, en su artículo 14, dice que todos los españoles somos
iguales en todo, pero la realidad nos demuestra que no siempre es así. Una
persona heterosexual nunca ha sido perseguida, insultada o agredida por su
orientación. Nosotros sí. La igualdad real no existe todavía, y por eso es
necesario seguir luchando. Ni muchos menos queremos ser el centro de atención.
Ojalá llegara el día en que asociaciones como la nuestra no fueran necesarias,
pero por ahora lo son.
—Parece que sea necesario decir, el pleno siglo XXI, que
la condición sexual no es lo que nos hace, o no, personas…
—Nos encontramos en pleno siglo XXI y es desolador ver que
aún tenemos que explicar cosas tan básicas como que la orientación sexual no
define la valía de una persona. Cada vez lo vemos todo más polarizado y
radicalizado. Y lo más preocupante es que en algunos países de Europa, incluso
dentro de la Unión Europea, se está retrocediendo. Hay gobiernos que están
prohibiendo las manifestaciones del colectivo LGTBIQ+. No podemos dar por hecho
que los derechos conquistados estén garantizados para siempre.
—¿Cuáles son los principales objetivos y actividades que
tiene previstas AIRE LGTBIQ+?
— En esta primera etapa, nuestro enfoque principal será la
visibilización y la educación. Pretendemos que se entienda qué es el colectivo,
que se conozca, que se sepa quienes pertenecemos a él. Queremos generar
espacios seguros y fomentar la comprensión del colectivo, a través de la
educación. Nos gustaría que la gente se sienta segura para hablar, para pedir
ayuda y para ser quienes son sin miedo.
—Hay muchos estereotipos alrededor del colectivo LGTBIQ+,
especialmente folclóricos y festivos…
—Claro que habrá eventos festivos, porque también
necesitamos financiar nuestras actividades, pero nuestro principal interés es
convertirnos en un referente educativo y social. Queremos romper con el
estereotipo de que solo somos "el colectivo del tacón, la pluma y el
abanico". Nuestra comunidad es diversa y tiene un papel importante en la
sociedad.
—Existe la idea de que Tomelloso no es una ciudad
especialmente tolerante con la diversidad sexual. ¿Creen que es cierto?
—Hay que decir que Tomelloso no ha sido una ciudad homófoba,
pero ha habido quienes nos han intentado ignorar o minimizar, y también hemos
vivido situaciones desagradables. Desde fuera muchas veces nos dicen:
"¡Qué bien que se respeta al colectivo!", pero cuando se trata de
convivir de verdad, a menudo encontramos trabas. Lo que buscamos es que la
tolerancia pase de ser un simple lema a una realidad tangible. Queremos que se
viva con naturalidad, no solo con aceptación a regañadientes. Apelamos que se
nos reconozca como parte de la sociedad, sin peros ni condiciones.
{{comentario.contenido}}
"{{comentariohijo.contenido}}"
Lunes, 31 de Marzo del 2025
Lunes, 31 de Marzo del 2025
Lunes, 31 de Marzo del 2025
Lunes, 31 de Marzo del 2025
Lunes, 31 de Marzo del 2025