El Ayuntamiento denuncia que este canon, impulsado por el Ejecutivo regional presidido por Emiliano García-Page, “supone una carga añadida para vecinos, empresas, cooperativas y entidades del tercer sector”. Según explica en la nota de prensa el alcalde, Javier Navarro, el impuesto ha generado subidas de hasta un 13 % en facturas domésticas y hasta un 84 % en recibos de negocios y empresas locales. También se han detectado casos concretos en los que entidades sociales han tenido que asumir costes adicionales de hasta 510 euros exclusivamente por este concepto.

El equipo de gobierno recuerda que en marzo de 2024 se presentó en pleno una moción conjunta de los grupos municipales de PP y VOX solicitando la derogación inmediata del canon, al considerarlo una medida fiscal “injusta”. La iniciativa fue rechazada por el grupo municipal del PSOE, que votó en contra.

Aunque la Junta ha anunciado que devolverá un 25 % de lo recaudado a los ayuntamientos, el alcalde considera este porcentaje “ridículo”. “Si nos cargan la gestión de su impuesto, nos deberían devolver el 100 % de lo recaudado”, ha señalado Navarro, quien insiste en que la recaudación y gestión del canon no es decisión municipal, sino una imposición directa del Gobierno regional.

El Ayuntamiento lamenta que, a pesar de que existen algunas exenciones, la mayoría de viviendas, el propio consistorio, así como empresas y cooperativas, tendrán que asumir este coste adicional, con un impacto directo en la economía local.

Ante esta situación, el alcalde vuelve a reclamar la retirada inmediata del impuesto, recordando que lo recaudado en solo dos trimestres “ya ha supuesto que 357.784,49 euros salgan de los bolsillos de los tomelloseros”, y advierte que la previsión anual supera el medio millón de euros. Además, subraya que este canon “no es una exigencia europea, sino una decisión política del Gobierno regional”, por lo que exige que “la totalidad de lo recaudado se destine a mejorar las infraestructuras hidráulicas de Tomelloso”.