“La idea surgió a la hora de querer actualizar unas fotos de novias en la web, se lo dije a Inma y a partir de ahí nos sedujo la idea de hacer algo diferente que fuera más allá de las fotos y que apareciera también la joyería, algo muy importante ese día. Creo que el resultado final ha sido muy bueno y diferente”, explicaba Yolanda.

“El toque final es muy soprendente”, apuntaba María Lara. “La idea era mezclar las tres disciplinas, pero se trataba de hacer algo más raro todavía. Además, el hecho de hacerla en Beat Wines también le aporta atractivo porque, al fin y al cabo, el vino también es cultura y le tenemos que agradecer a Nuria Moya su apuesta por este tipo de exposiciones. Con ella, todo han sido facilidades”, señalaba Inma Chacón.

Antonio García remarcaba “el riesgo y el atrevimiento de presentar unas fotos donde los rostros se cubren con un plástico, unas fotos que no es totalmente limpia, sino que aparece con cierto grano. Presentan un tono verdoso, como si fuera el fotograma de una película. El papel fotográfico perla lustre resalta muy bien todo esto”.

Nuria Moya expresaba su satisfacción por “poder albergar una exposición de estas mujeres tan emprendedoras, dispuestas siempre a estas iniciativas tan bonitas y rompedoras”. Las profesionales destacaron también la disponibilidad de unas modelos “cien por cien tomelloseras, tenemos muy buena materia prima en nuestra ciudad. Alguna de ellas, como María, ya la conocíamos y fue más sencillo trabajar con ella y con las otras tres improvisamos algo más porque como decíamos antes este proyecto se gestó muy rápido. La cabeza de Yolanda va como un tren de alta velocidad en Japón”. 

Las tres mujeres y Antonio coincidieron en señalar que “la muestra será la primera de muchas” y finalmente brindaron por ello con un vino Verum.