Dan Trachtenberg ha vuelto este año por partida doble con el objetivo de revitalizar y expandir la saga de Predator. Primero vino Killer of Killers y ahora Trachtenberg nos transporta a un mundo hostil en esta nueva entrega conocida como Predator: Badlands.

En esta entrega conocemos a Dek, un joven Yautja que, para demostrar su valía, decide ir al planeta más peligroso del universo para cazar a una presa letal. En su viaje no estará solo, porque le acompañará una sintética de Weyland-Yutani —sí, la misma empresa de la saga Alien— conocida como Thia.

Voy a ser sincero: desde que se anunció esta película tenía muchas ganas. Trachtenberg ha demostrado que sabe hacer muy bien una película de Depredador, siguiendo las bases a rajatabla con Prey, pero en esta, cuando supe que el Predator iba a ser el protagonista, me pareció la mejor idea que había tenido.

En toda la saga, el Depredador siempre es el monstruo que quiere cazar a los humanos. Ya lo vimos con el Chuache, también con Danny Glover y, por supuesto, con Adrien Brody y, por último, con Naru y el trío protagonista de Killer of Killers.

Pasa un poco igual que con Alien: Romulus, una película que sigue las bases esenciales, donde la primera mitad recuerda muchísimo a la cinta original de Ridley Scott y su clímax es más Aliens: El Regreso, de James Cameron. Y mirad que me pareció un peliculón cuando lo vi en su día, siendo una carta de amor a la franquicia.

En Badlands cambia el tono, y en este caso la película nos muestra cómo son los Predator y, en mi sincera opinión, esto es lo mejor que hace.

Dek tiene su propio viaje del héroe, empezando como un Youngblood cuyo clan decide repudiarlo por débil, cosa que el código Yautja sigue estrictamente. Al estar en ese planeta donde literalmente hasta lo más pequeño es mortal, Dek aprende a convertirse en cazador. Los personajes interpretados por Elle Fanning —en esta película está por partida doble— son increíbles y creo que se diferencian entre sí. Thia es el corazón de la cinta y con quien acabas encariñándote, mientras que, por otro lado, su hermana Tessa es una sintética dispuesta a cumplir órdenes de la empresa para la que trabaja, y da igual si para ello debe cazar al Predator.

En lo técnico, y habiéndola visto en una sala de cine IMAX, es alucinante. El planeta se siente vivo, al igual que las distintas especies que habitan en este, cada una con su propio diseño. El propio Predator se ve muy bien pese a ser un tipo metido en un traje: se nota que se puede tocar con las manos. Todo el set de armas que dispone es único, y algunas nunca antes vistas en la saga, como por ejemplo un arco, y por primera vez meten una espada de plasma.

Trachtenberg, junto a su equipo, también ha decidido que Dek hable en su idioma. El lenguaje Yautja me parece lo mejor y un añadido original y nunca antes visto, debido a que en otras películas solo le escuchábamos emitir sonidos, gritos o palabras sueltas, pero aquí es algo increíble.

Por decir algo negativo, me molestaba un poco la calificación al ser para mayores de 13, teniendo en cuenta que las cintas de Depredador suelen ser para mayores de 18, pero aquí tiene sentido, y os puedo asegurar que no os preocupéis porque sigue teniendo esa acción más que digna de la saga, solo que aquí está más elevada a la enésima potencia, aunque sí quitaría algún momento de humor un poco tonto. Pero en general tiene momentos divertidos bien implementados.

Predator: Badlands supone una evolución en la franquicia. Es lo que tenían que haber hecho hace muchos años en vez de no parar de poner a los Yautja intentando cazar humanos.

Teniendo en cuenta que esta película está muy conectada con la saga de Alien, lo más probable es que hagan de nuevo Alien vs. Predator (AVP), y me gustaría que se hiciera tanto si está Fede Álvarez como Dan Trachtenberg en dirección y guion.

Para finalizar con esto, creo sinceramente que los ejecutivos de 20th Century deberían darle la franquicia de Predator a Dan Trachtenberg porque, en verdad, lo que está haciendo me parece de lo mejor que he visto, por no decir que quiero seguir viendo más del mundo de los Yautja.