Explica Clemente Cuesta que Voz de Tomelloso cogió el testigo de Luz de Tomelloso, “un periódico que dirigió mi suegro durante algunos años y que tenía cierta ligazón con la Iglesia. La voz era quincenal, tenía muchas secciones y curiosidades y creo que logramos tener una buena presencia en la sociedad tomellosera, pues contábamos con bastantes suscriptores y la gente nos enviaba sus cartas, opiniones y colaboraciones”. Del mueble de su despacho, Cuesta localiza rápidamente los tomos del periódico, cuidadosamente encuadernados. Hojea las páginas con nostalgia, comenta noticias que aparecen, fotografías, magníficos dibujos, anuncios de Negrillo, Gustavo Lahoz o Tiburcio Acedo…todo presentado con un buen diseño y maquetación. ”Había una sección titulada Cosas que pasan, otra que se llamaba Verdades. Lógicamente en aquella época la política era intocable, pero aún así , intentábamos llevar noticias interesantes a nuestros lectores, relacionadas con los movimientos sociales de entonces, la economía o el deporte”. No se olvida de la sección de nacimientos, matrimonios y defunciones “que tanta expectación levantaba”. La redacción estaba ubicada en las oficinas de su bodega, en el Paseo de Circunvalación y la tirada se realizaba en una imprenta de Ciudad Real.  

Sonrie Clemente Cuesta al contemplar en su periódico la fotografía de una familia agraciada con una lavadora en un sorteo, la viñeta de un jovencísimo José Luis Cabañas o un extraordinario de Navidad que apareció con algunas páginas en color. “El periódico era sostenible financieramente hablando. Las empresas y casas comerciales respondieron muy bien. Estuvimos saliendo hasta marzo  del año 1.967, y cuando lo dejamos, no fue por problemas económicos, sino porque hubo colaboradores que no siguieron y la carga de trabajo era ya demasiado grande para mí solo”.

Recuerda Cuesta a colaboradores de La Voz de Tomelloso como José López Martínez, Pablo Villena, Juan Torres, Ramón Serrano, también a Cheles, su mujer, que tanto le ayudaba en los envíos a los suscriptores y otras labores relacionadas con la publicación.

Confiesa que siempre ha sido un devorador de periódicos, le gustaba mucho el Diario 16 de la época de Pedro J.Ramírez y ahora en la época digital se pone delante del ordenador para ver que dicen los tres o cuatro periódicos más importantes. “Viendo periódicos de distintas tendencias, es la mejor manera de estas informado”, lo que le da pie a recordar una frase célebre del escritor americano, Mark Tawin, en la que venía a decir lo siguiente. “Si usted no lee el periódico está desinformado, si usted lee el periódico está mal informado”.