Por ejemplo, por un lado, la poesía se caracteriza por la intensión, no por la extensión (la poesía debe ser breve; por ende, sigo sin entender el motivo por el que se les pone a los concursos un mínimo de versos). En otras palabras, un poema debe albergar una emoción. Sin embargo, ¿qué sentimiento despierta 'Anuncios por palabras'? El escrito de Antonio Tocornal simplemente despierta sorpresa o admiración debido a su originalidad y a su afán de provocar o jugar con el lector.

Por otro lado, el ritmo es el motor del poema. De entrada, el escrito ganador del premio 'José Antonio Torres' desprecia la musicalidad de los versos, de la métrica y de la rima, ya que el autor escribe en prosa. Pero no importa porque el ritmo también se fundamenta en la repetición periódica de sílabas tónicas y átonas, en la entonación y en las pausas, en el color de las vocales, en la dureza o suavidad de las consonantes, etcétera. No obstante, el texto prescinde completamente de estos recursos. Además que, como decía en mi anterior artículo titulado 'Clamoroso error del jurado de poesía en la Fiesta de las Letras', la ausencia de figuras retóricas denota que Antonio Tocornal jamás ha tenido la intención de escribir género lírico.

Es evidente que no se le pueden poner puertas al campo o límites demasiado rigurosos a la poesía, pero en el campo siempre se han marcado lindes para separar las propiedades. Así, un dueño cultiva su parcela sin equivocaciones. Los estudiosos de la literatura se dedican a implantar esas lindes con el objetivo de separar un género literario de otro y no confundir una narración con un poema. Es incuestionable que los géneros literarios son abiertos e imperfectos, pero las leyes se ponen para aclararnos y ayudar a identificar la naturaleza de un texto. De lo contrario, absolutamente todos los escritos serían literatura y todos los juegos literarios serían poemas. Por consiguiente, los límites en la poesía existen e, incluso, son necesarios.

Por esa razón, a pesar de desconocer el verdadero significado de la poesía, durante siglos los teóricos de la literatura (como Kurt Spang) han fijado unas líneas rojas. Lógicamente, existen situaciones ambiguas, o textos de dudosa naturaleza como 'Anuncios por palabras' de Antonio Tocornal. Aun así, afortunadamente hemos heredado de los verdaderos intelectuales unas pautas que nos ayudan a entender los límites de la poesía. Y son tan evidentes que hasta un simple estudiante de filología hispánica los conoce y sabe identificar el clamoroso error cometido por el jurado de poesía en la pasada edición de la Fiesta de las Letras 'Ciudad de Tomelloso' 2019. Solamente se necesita estudiar a los grandes clásicos.