Rodrigo ha destacado la importancia de “un proyecto pionero en el que se va a formar al profesorado, a las familias, que son una pata fundamental del proyecto, y al alumnado. Nos hace mucha ilusión porque es un proyecto que va en el ADN de este Equipo de Gobierno, iba en nuestro programa y ha tenido una gran receptividad en los centros que se ha puesto en marcha”

La concejala ha asegurado que “aunque el Ayuntamiento no tiene competencias en educación,  si tenemos incumbencia y nos interesaba mucho este proyecto después de conocer los resultados de un estudio que se hizo sobre el bulling en la ciudad y que arrojaba unos datos muy preocupantes. Con este proyecto esperamos conseguir buenos resultados”.

Pedro Martínez ha agradecido la apuesta del Ayuntamiento de Tomelloso “por este proyecto socioemocional que ha empezado en diciembre y se prolongará hasta junio. La sociedad se puede transformar a partir de la educación y es bueno aportar aire fresco como el que trae este proyecto”.

Ha sido Martín Sánchez el que ha explicado los pormenores del Proyecto EME “que tiene su vector en la inteligencia emocional y otras habilidades sociales con el objetivo de mejorar las competencias de los docentes, las familias  y el alumnado, poniendo el foco en el entorno de cada estudiante. Hemos dado estas habilidades a los profesores y a las familias para que tengan la capacidad de  integrar en su día a día esas capacidades que permitan mejorar competencias como la empatía, la capacidad de comunicación, la inteligencia emocional o la resolución de conflictos”. 

Sánchez ha subrayado que “estamos ante un modelo de formación indirecta que es la que se ha demostrado más efectiva y permite mejorar una serie de competencias fundamentales en el alumnado como son el rendimiento académico, su capacidad para tomar decisiones, resolver conflictos y mejorar el clima del aula, entre otras muchas”.

Este proyecto se financia con fondos del Ayuntamiento, ha indicado al final Rodrigo, que confía en la obtención de buenos resultados a través del grupo de control y el grupo de experimental que trabajarán en el proyecto. “Por este motivo se ha seleccionado el colegio José María del Moral, que es un centro de doble línea y con el Instituto Alto Guadiana se pueden obtener importantes conclusiones porque recibe un perfil de alumnado muy variado”.