A todos los recibió con su habitual hospitalidad, Rafael Torres, que echó una mirada atrás para recordar los inicios de un certamen “que quisimos que fuera ambicioso, ya no solo en el plano nacional, sino también en el plano internacional. Ha tomado una gran magnitud y no nos consta que haya otro certamen en España que reparta el dinero en premios que se reparte aquí: 146.700 euros”. Pero el presidente incidió que es una obra colectiva agradeciendo la generosa ayuda de los patrocinadores y colaboradores, así como de los socios de la entidad en el despegue del certamen. “Esta gran obra social la queremos realizar a través de los artistas que se lo merecen todo por el papel tan importante que juegan en nuestra sociedad. Gracias a ellos el patrimonio artístico de esta cooperativa es también el de Tomelloso ”.

Se refirió Torres a la Medalla al Mérito Cultural, galardón que recientemente el Gobierno de Castilla-La Mancha otorgó a la entidad y volvió a repartir méritos entre instituciones, empresas y personas “que también son partícipes de esta medalla” y aseguró que “la prosperidad de esta empresa es también la prosperidad de Tomelloso”.

En el final de su intervención habló de la razón de ser de un museo “al que se viene a disfrutar de la creatividad de los artistas. El arte es el medio de comunicación del sentimiento y la sensibilidad, es la interpretación del entorno a través de esa sensibilidad, traduciendo la realidad en emoción”. Rafael Torres no olvidó en reivindicar la importancia del vino como alimento, “ tomándolo con moderación repercute beneficiosamente en la salud”, dijo,  antes de desear una feliz Navidad a todos los asistentes.

“Un gran legado para las generaciones futuras”

Por su parte, Inmaculada Jiménez consideró un honor estar en una inauguración “sencilla, emotiva y muy necesaria”. La primera edil confesó el “cariño, respeto y admiración” que siente hacia Rafael Torres “que en estos veinte años que lleva al frente de la cooperativa ha dado un importante salto de innovación, modernidad y prosperidad y, sin duda, va a dejar un gran legado a las generaciones futuras. Con la perspectiva que da el paso del tiempo, la historia lo juzgará como se merece”. Jiménez tuvo claro que “cuando a la cooperativa Virgen de las Viñas le va bien, a Tomelloso también le va bien y estamos obligados a trabajar y avanzar juntos”.

Al mismo tiempo, expresó su admiración por esas grandes dosis de creatividad que en Tomelloso demuestran muchos artistas amateurs  “en esta ciudad el germen de la  cultura se respira en todos los rincones” y felicitó a los premiados “que contribuyen a que esta ciudad avance no solo en prosperidad, sino también en cultura”. Al final, Jiménez celebró que el acto fuera algo más alegre que el del año pasado y deseó felices fiestas a todos. “Este año debemos seguir con prudencia y cautela, pero las palabras y las miradas son otras. Por este motivo en la postal navideña que he enviado como alcaldesa se destaca el esfuerzo y el sacrificio de nuestros antepasados que tan han hecho grande a Tomelloso”.

Tras la inauguración, los asistentes recorrieron los pasillos de la exposición para admirar cerca de setenta obras en las que los artistas enseñan una gran creatividad. Un maravilloso derroche de  talento y virtuosismo; ya sea con rotundas perspectivas, expresando la fuerza del color, recreando atmósferas y horizontes increíbles, interpretando con emoción paisajes rurales, marinos y de la vida cotidiana,  regalándonos preciosas vistas de Nueva York, Bangladesh o Cádiz; sacando todo el jugo a  una torre de palets abandonados o un paseo de la Guardia Real; brillando en los estilos abstracto y figurativo;  plasmando emociones, ideas y conceptos que se gestan en el corazón y en la inteligencia en los que siempre se da un amplio margen al espectador para que también realice su propia interpretación de la obra. En el vigésimo certamen, los artistas han vuelto a sacar nota alta.