Los primeros veinte minutos marcaron la pauta de lo que iba a ser el partido. Un Atlético Tomelloso que apretó de salida frente a un rival atrevido que, lejos de encerrarse, tomó el mando en algunas fases del partido con centrocampistas que se asociaron bien como Siller y Cristian. La baja de Agustín pesó mucho por su capacidad para destruir las contras del rival y ese inmenso trabajo que realiza para recuperar balones y que los medios rivales no se sientan cómodos. Su sustituto, Juanma López, estuvo muy lejos de las prestaciones del ruidereño y acabó siendo sustituido en la segunda parte por Jesús Serna. 

En este primer tercio del partido pudo adelantarse el Atlético, pero el larguero repelió el disparo de Andrei, que tuvo buena presencia en la primera media hora, pero luego se iría difuminando.  Los locales reclamaron penalti en una caída dentro del área de Roberto, pero el colegiado entendió que se tiró y le mostró amarilla. Una jugada similar ocurrió en el área local. Al descanso, 0-0 y la sensación de que los locales tendrían que hacer mucho más para doblegar a un rocoso Almodóvar.

Comenzó llevando la iniciativa el Almodóvar en la segunda parte, mientras el Atlético esperaba su oportunidad en un contragolpe que nunca llegaría. Gallego intentó varios remates de cabeza, aunque siempre en posición algo forzada y con el aliento cercano de unos centrales que le vigilaron bien. Tampoco pudo explotar Joaquín su potente disparo.  La entrada de Álvaro Gil, entre algodones toda la semana, dio mayor profundidad al Atlético. Pero el partido se puso muy cuesta arriba con el gol de Coleto que se atrevió a lanzar desde más de treinta metros y sorprendió a Asenjo.

Con el 0-1 y media hora de partido por delante, el Atlético se fue con todo arriba y tuvo el empate en un disparo de Gallegó que, otra vez, se topó con el larguero y en otra jugada en la que el delantero no llegó por milímetros a un medido centro de Álvaro Gil. También generó peligro Álvaro Dueñas con un centro chut que se paseó muy cerca de la línea de meta, pero la pelota no encontró rematador. Morales, lateral por necesidades del guión, puso varios centros de peligro que tampoco se finalizaron.

Con una ofensiva tan desesperada, el Atlético arriesgó dejando muchos metros a su espalda y hasta tres veces los delanteros visitantes se presentaron solos delante de Asenjo que les ganó la partida en las tres ocasiones. El partido murió entre el infructuoso dominio local, la subida de Asenjo a rematar un córner y la resignación de los doscientos espectadores que acudieron al partido.