“Nunca es tarde si la dicha es buena” señalaba la alcaldesa, Inmaculada Jiménez. en el acto inaugural de la exposición de fotografía “Pavón 2.0” que Carlos de la Osa ha llevado a La Posada de Los Portales. La muestra formaba parte de los actos del centenario de Francisco García Pavón, pero la pandemia obligó a su aplazamiento. Casi superados aquellos duros tiempos, del 8 de abril al 8 de mayo se podrá disfrutar de una maravillosa exposición en el que su autor consuma un proyecto iniciado hace siete años y en el que recomienda la lectura de los textos que acompañan las fotografías.  Buena parte de ellas se han podido ir viendo en La Voz de Tomelloso en una sección que llevaba el mismo título que la exposición.

En la puesta de largo de la muestra, el fotógrafo y periodista estuvo rodeado de familiares, su nutrido grupo de amigos, la concejala de Cultura, Nazareth Rodrigo; el concejal de Festejos, Raúl Zatón, otros ediles de la Corporación con los que trabaja cada día, trabajadores de distintos departamentos del Ayuntamiento, fotógrafos de la ciudad, Francisco José Barato en representación de la Diputación que ha editado un magnifico catálogo y el comisario de la exposición, nuestro compañero, Francisco Navarro.

La sensibilidad del objetivo de Carlos de la Osa y la pluma del gran García Pavón han resultado ser una combinación perfecta. El mismísimo autor de Plinio hubiera disfrutado con las exquisitas imágenes que el fotógrafo ha puesto a sus textos.  Fotos llenas de sensibilidad, impecables técnicamente, en color y en blanco y negro, captadas desde un motivo que emociona al autor y que denotan la predilección que siente por Pavón y Tomelloso: los mágicos claro-oscuros de una bodega, una vieja tinaja, el detalle de una bicicleta apoyada a una pared, la fachada de una antigua casa, cielos de amanecida o atardecer que se funden en el horizonte con el mar o una viña de la Mancha, la nostalgia que provoca una vía de tren abandonada, la nobleza en la mirada de una mula, la imponente belleza de las Lagunas de Ruidera, el encanto del paseo Ramón Ugena en otoño, Los Portales en noche cerrada, solitarios bombos, corrales, empotres, legendarios casinos….cada foto con su propia historia  que Pavón cuenta con su peculiar e inigualable lenguaje.

Un homenaje a Pavón

“Cuando Sonia García Soubriet publicó el diccionario de Pavón se me encendió la luz. Empecé a publicar fotos en las redes sociales y luego en los medios digitales de los amigos. Esta exposición viene a ser un poco el colofón de ese proceso, un homenaje a García Pavón en el que enseño fotos de todo mi archivo, algunas tienen veinte años y otras más recientes que he realizado pensado en el texto que las acompañaría”, explicaba Carlos de la Osa en la puesta de largo de la exposición.

El fotógrafo no se cansó de elogiar a Pavón. “Era un genio, leerlo es muy agradable y siempre que lo hacía me imaginaba como eran las calles, lugares y  personajes que describía. Todo lo que cuenta se presta mucho a expresarlo en una fotografía y ha sido un proceso laborioso, pero no complicado. Ha sido bonito ir buscando una foto a cada texto que había seleccionado”. Reconocía también que le impone cierto respeto exponer en La Posada “mis exposiciones han estado siempre en bares y exponer en un lugar tan representativo como La Posada  me genera responsabilidad y emoción al mismo tiempo”, explicó al mismo tiempo que abrazaba a su hija mayor y agradecía el apoyo de Inmaculada Jiménez, Nazareth Rodrigo, María, Francisco Navarro, Antonio Gómez, Víctor Gallego y otras personas que le han ayudado a hacer realidad este esperado proyecto.

Inmaculada Jiménez consideró “muy emotivo el homenaje que Carlos de la Osa rinde a García Pavón al que nunca nos cansaremos de admirar. Admiro la fotografía de Carlos, en su día a día, y también en la intimidad, porque transmite mucho en cada imagen que capta, con una sensibilidad muy especial. Sin duda, se merecía esta exposición y Tomelloso tiene que disfrutar de ella”.

El último apunte vino de Francisco Navarro, el comisario que aseguró que “Carlos de la Osa es tan honrado y buena persona como demuestra su fotografía. Tiene un punto para hacer fotografía que no se lo conozco a nadie. Con la sencillez que le caracteriza nos regala verdaderas obras de arte que, en este caso, nacen de la admiración y reverencia que le profesa a García Pavón. Unir estas fotografías con los textos de Pavón ha sido un gran acierto”.

Los asistentes pudieron compartir unos vinos Allozo en el Rinconcito, broche a una entrañable velada en la que la  gente estuvo muy a gusto. Lo que no pudieron estar, tienen un mes por delante para disfrutar de una exposición en la que Carlos de la Osa recrea de forma brillante el universo de Pavón.