Este miércoles tendrá lugar en Manzanares la primera Mesa de Precios de Melón y Sandía de Castilla-La Mancha. Hablamos de cultivos que han ido teniendo una creciente importancia social y económica en la provincia y del que dependen de miles de familias. Por este motivo, La Voz de Tomelloso ha entrevistado al presidente de la Interprofesional del Melón y la Sandía de Castilla-La Mancha, José Ángel Serrano, que aterrizó en el cargo hace meses y expresa su intención de emplearse a fondo para beneficiar a un sector "que llevó en la sangre".   

-Parece que esta campaña ha empezado de la mejor manera posible ¿no es así?

-Sí, los precios son muy aceptables, pero ahora hay que mantenerlos. Las previsiones es que a primeros de agosto se produzca una  compensación y los precios sean más normales. Esos veinte días de lluvia que tuvimos en mayo y junio  provocó que sufriera la planta y ha acabado afectando a la calidad y al tamaño de los melones más tempranos. La gente tiene que tener un poco de paciencia porque en estos primeros días de campaña, tendremos una calidad media y un tamaño de los melones alrededor de los dos kilos. A primeros de agosto tendremos nuestra calidad y el tamaño esperados y creo que unos precios algo más  estabilizados.

-¿Qué factor o factores han ayudado a este buen comienzo?

-Nuestras previsiones están reguladas por el factor tiempo. Llevo muchos años en el sector y hacía mucho tiempo que la producción de la Mancha no se juntaba con la de ninguna otra comunidad productora. Murcia ya terminó y Valencia y Alicante dicen que no han tenido agua para sembrar, algo que no es cierto, pero bueno es lo que ellos dicen. Haber empezado solo  con género nuestro ha sido determinante.

-¿Está contribuyendo la Interprofesional con su trabajo a una mejor regulación de los mercados?

-En cierto modo sí. La Interprofesional aconseja sobre el momento ideal para cortar el producto en su punto óptimo. Hay que recordar también que a un agricultor le cuesta treinta céntimos  producir un kilo de melón por la subida de costes y en el caso de cooperativas como la nuestra, nos cuesta otros veinte céntimos enviar el melón a destino, por tanto ya estamos en cincuenta. Por tanto,  el precio ideal para que el cultivo sea rentable debe situarse entre 75 y 80 céntimos. Ahora los precios están por encima del euro, pero a partir de la semana que viene se estabilizarán en torno a los 80 y 90 céntimos.

-¿Qué producción y calidad  se puede esperar este año?

-Pensamos que vamos a tener muy buena calidad y una reducción de kilos. En nuestro caso de Santiago Apóstol tendremos una producción entre 18 y 20 millones de kilos. Hemos crecido en socios, pero tenemos esa merma de peso de la que hablaba antes.

-Usted preside Santiago Apóstol, una de las cooperativas hortofrutícolas más importantes de la región, ¿faltan todavía muchos cultivadores de melón en las cooperativas?

-Sí. El sector tiene que agrupar mucho más la oferta, ya sea a través de cooperativas o cualquier otra fórmula que permita ser más grandes. O nos agrupamos o desaparecemos. Porque en los años que las campañas vengan mal, muchos agricultores pueden ir a la ruina si no forman parte de grupos fuertes y bien posicionados para defenderse en los mercados.

-¿Dónde están los principales mercados del melón de la Mancha?

- Nuestro principal mercado está en Europa. Llegamos sobre todo a Inglaterra, Países Bajos, Polonia…por desgracia hemos sufrido el boicot ruso y desde la pandemia el tema de los contenedores subió un disparate y ya no podemos enviar producto a Hong Kong. Y luego llegamos a las grandes zonas consumidoras de nuestro país. 

-En su cooperativa llevan a cabo una gran labor social de empleo, ¿cuántos trabajadores esperan en esta campaña?

-Ayer la encargada de personal no se pudo ir a comer porque entraron cincuenta personas a trabajar. Estaremos en torno a 120 trabajadores. Muchos jóvenes  ganan un dinero que les ayuda a costear sus carreras y para la cooperativa esta circunstancia es un motivo de orgullo.

-¿Qué supone para usted estar al frente de la Interprofesional del Melón?

-Me lo propusieron y acepté  con la finalidad de ayudar mucho más el sector y tratar de aportar unas ideas que nacen de la experiencia que tengo. Todas estas ideas y proyectos las queremos retomar con el nuevo consejero para encauzarlas por buen camino. Me he criado en este sector, lo llevo en la sangre y daré lo mejor de mí para que las cosas salgan adelante.

-¿Qué me diría de su predecesor en el cargo, Cristóbal Jiménez?

-Tuvo unos comienzos complicados hasta que la gente se fue uniendo y concienciando de la necesidad de la Interprofesional. A Cristóbal hay que reconocerle su dedicación y esfuerzo, defendiendo siempre el sector con uñas y dientes y teniendo siempre muy claro hacía donde había que ir. Afortunadamente sigue con nosotros y creo que nos puede seguir prestando una ayuda muy valiosa.