Desde hace unos años, Jesús García Ruiz, joven argamasillero que tiene dualidad en su nacimiento; pues su padre es natural de Tomelloso y su madre de Argamasilla de Alba, viene siendo noticia destacada en la prensa por las dos veces que lo han nominado y  recibido los importantes Premios Goya que anualmente concede la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, con la finalidad de premiar a los mejores profesionales de cada una de las distintas especialidades del cine español. Y es para los que lo conocemos una alegría; porque Jesús tiene el don de la generosidad y una disposición perenne para entregar sus dotes personales en ayuda de todos los que lo conocemos.

Para que sepamos un poco más de su formación diremos que, los estudios secundarios, los realizó en su pueblo natal, y el Bachillerato de Artes Plásticas y Diseño lo cursó en la Escuela Superior de Artes “Antonio López” de Tomelloso. Una vez lo culmina se traslada a Madrid para cursar el Grado Superior de Maquillaje Profesional y Caracterización, realizando prácticas en el importante Taller de Nacho Díaz. Taller donde destaca por su magnífica labor en trabajos de su especialidad, siendo contratado por el creador del mencionado Taller, habiendo realizado, hasta la fecha, más de cien trabajos en películas; asimismo en episodios para televisión.

El primer Goya lo consigue, dentro del apartado de maquillaje y caracterización,  con la película Mientras dure la guerra y el segundo por Las leyes de la frontera: actualmente ha sido nominado por tercera vez por La Sociedad de la Nieve, película dirigida por Juan Antonio Bayona, la cual está basada en el libro homónimo de Pablo Vierci, que relata el accidente del Vuelo 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya en la cordillera de los Andes en 1972; película que ya ha recibido numerosos premios en diferentes certámenes de cine.

            Por todo lo anterior, poco tiempo pasa Jesús en Madrid, lugar donde actualmente reside; pues su trabajo lo lleva a diferentes países, entre otros  su estancia en Turquía; pues allí se filmó la película titulada Por los pelos; en la República Dominicana, la serie titulada Sin límites, (de Amazón Prime); igualmente viajó a Bulgaria: país al que se tuvo que desplazar para hacer un “maquillaje protésico de quemado” al personaje Yuri, para la serie que Movistar+Nasdrovia rodaba en el País balcánico.

Nos hallamos, pues, ante un joven trotamundos que, desde la atalaya de su generosa personalidad, va matizando la luz de lo que verdaderamente lo hace importante: sencillez, humildad, cercanía, amabilidad,...,  y el don de la entrega desprendida y generosa, muy meritoria, a un trabajo minucioso y detallista que se culmina con muchas horas de entrega: sin abandonar Jesús su perenne sonrisa.

Los que lo conocemos sabemos tiene el don de hacer lo difícil fácil, de ir postulando su argamasillerismo donde suena la campana de la fama, haciendo que lo nuestro, lo manchego, vaya destacando en un panorama que suma la idealidad con la realidad. Y, mientras tanto, si es necesario, con su mochila al hombro y su baúl profesional, acude a su lugar de origen sin importarle, hacer más de doscientos kilómetros, para caracterizar a los improvisados actores locales.

Con mimbres tan importantes le auguramos una carrera que lo sitúa, ya lo ha situado, en el palmarés de la fama; pues su entrega al trabajo brilla por excelente. Con dicho bagaje ha logrado ir cumpliendo los sueños que un día, no tan lejano, lo llevaron a trabajar, con esfuerzo y dedicación, primorosamente, en efectos especiales, dando vida a personajes de un sinfín de películas.  Entre otras, citaremos:  La trinchera infinita, Mientras dure la guerra, Quien a hierro mata, El silencio del pantano; Gigantes. La Abuela, Orígenes secretos, Todos los hombres de Dios, etc.. Asimismo, en este año 2023, entre otros proyectos,  ha participado en ocho episodios de la serie de TV Los Farad.

Con nuestra enhorabuena por sus éxitos le deseamos siga aumentado su palmarés con cálida y generosa entrega, deseándole, en NAVIDAD Y AÑO NUEVO, lo mejor de lo extraordinario. Laus Deo.