Así lo ha detallado Merino durante la visita que ha realizado junto a Paco Núñez a una explotación ganadera en Talavera de la Reina, donde ha criticado que el gobierno del PSOE en la región no tiene rumbo, ni tiene quién lo dirija, motivo por el que llevan políticas erráticas y trabajan a golpe de ocurrencia, sin llevar la iniciativa ni marcar la agenda política de nuestra tierra.

La portavoz del área de agricultura y ganadería de los populares en la región ha calificado el momento de "muy serio" para que Page esté dejándose llevar, haciendo anuncios solo porque la oposición le quita la iniciativa y no cogiendo las riendas en un momento de especial relevancia para uno de los pilares económicos de Castilla-La Mancha como es el sector primario.

"Page está cansado de Castilla-La Mancha, le aburren los asuntos que afectan a sus paisanos, y está más preocupado de meterse en intrigas palaciegas y ser la novia en todas las bodas", ha afirmado con resignación Merino, que ha recordado que el propio Page, como diputado autonómico, tendrá la oportunidad mañana de votar a favor del sector ganadero de la región gracias a la PNL que presentará el PP-CLM y que incluye un ambicioso plan para el sector.

Lola Merino ha centrado la atención en el Plan de Apoyo y Defensa de la Ganadería de Castilla-La Mancha que mañana se presentará en el Pleno de las Cortes Regionales, y con el que pretende recabar el apoyo de los grupos parlamentarios de PSOE y VOX con el fin de que el sector, que ha sido atacado una y otra vez por el PSOE y la izquierda, vea como sus explotaciones son rentables y pueden dejar de trabajar a pérdidas.

La diputada popular ha recordado algunos de los últimos episodios relacionados con la agricultura en la región, como el gobierno de Page gastando dinero en campañas que piden reducir el consumo de carne; o el ataque del ex ministro de Consumo, Alberto Garzón al sector cárnico nacional, tras el que Page se negó a reprobar al mismo en las Cortes.

En definitiva, un plan, el que se presentará mañana en el parlamento autonómico, que pretende devolver la dignidad al sector primario, y más concretamente a la ganadería, además de garantizar a los productores que su actividad es rentable y les permite ganarse la vida.