El once local estuvo plagado de novedades con Isaac y Franco de centrales, Casas como interior derecho y Carlos Arroyo acompañando a Joaquín en la punta del ataque.  Salió ambicioso y con mordiente un Tarancon, que como se sabía, es un equipo que no especula, de los que llega con muchos arriba, que trata de asociarse siempre con jugadores de buen pie. Generaron un par de ocasiones los conquenses que, sin embargo, a partir del minuto 20, cedió en su ímpetu ofensivo y el partido lo pasó a dominar el Atlético que ofreció buenas combinaciones por la derecha. Los locales generaron peligro en varias apariciones de Joaquín que mantiene su excelente momento de forma. Primero lo intento con un disparo lejano que desvío Sergio a corner, después con un remate de cabeza, marcando los tiempos, que salió ligeramente alto y a punto estuvo de culminar una buena estrategia de córner desde la izquierda con una repentina aparición en la salida. El delantero también reclamó un posible penalti por un agarron dentro del área pero nada quiso saber el colegiado. Pero es mucho lo que produce el delantero a lo largo de un partido. 

En  ofensiva local también aporto Marco que derrocho mucha energía en el medio. Un disparo suyo de volea rozó el palo y en otro tiro con potencia desde fuera del área puso en dificultades al portero. El primer tiempo acabó con la sensación de que el Atlético había ido de menos a más, al contrario que un Tarancón que fue perdiendo prestaciones.

Pero volvió a salir amenazante el Tarancon en la segunda y marcó en el 48. Cris regateo por dos veces a Franco, quiza con demasiada facilidad, y se sacó un disparo cruzado ante el que nada pudo hacer Monreal. Intentó responder el Atlético solo tres minutos después con una buena incursión de Bonilla que ganó la línea de fondo y su pase atrás no lo aprovechó Carlos Arroyo que eligió control y tiro, cuando la situación requería un golpeo de primera.

Con ventaja mínima, el Tarancón pensó que para evitar sobresaltos lo mejor era aumentar diferencias y siguió jugando y llegando con peligro a las inmediaciones de Monreal. Pudo marcar Nico en un lanzamiento de falta que atajó Monreal, pero el portero local nada pudo hacer en otro jugadón de Cris, magnífico jugador, que regateó en la frontal y acabó sacando otro disparo cruzado que acabó entrando tras pegar en el palo. Con el 0-2 el Tarancón se adueñó de balón, marcó el ritmo del partido y daba la sensación de poder hacer algún gol más ante un Atlético muy castigado físicamente. Movió la banca Morales para dar entrada a Delgado, Pumareta y Alex. No cambió demasiado el panorama y el Tarancón seguía jugando al son que marcaban Salmerón y Cris, dueños de la zona de ancha. 

Pero hay situaciones del fútbol que no están amparadas por ninguna ley o causa y en el descuento todo cambió con esos dos goles, muy bellos ambos, de Pumareta. Héroe en una tarde que se tornaba triste y que acabó con aires de fiesta. Se puede seguir creyendo en este Atlético Tomelloso.