La Facultad de Letras de la Universidad de Castilla-La Mancha en el
Campus de Ciudad Real acoge hasta el 31 de octubre la exposición
‘Rolando 2:15-2:45. 50 años de la primera masacre de ETA’. La muestra,
impulsada por el Centro Memorial de las Víctimas del
Terrorismo, reconstruye aquel primer atentado indiscriminado de la
banda terrorista que se saldó con 13 muertos y más de 70 heridos.
El viernes 13 de septiembre de 1974, a las 14:30 horas, una potente
bomba, reforzada con metralla, explotó en el comedor de la cafetería
Rolando, en la madrileña calle del Correo, cerca de la Puerta del Sol.
Fue el primer atentado masivo e indiscriminado de
ETA, que sabía de la presencia de civiles en el local y eligió el
momento en el que había más clientes: la hora de comer. Causó 13 muertos
y más de 70 heridos.
Hasta el 31 de octubre podrá verse en la Facultad de Letras de la
Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) en el Campus de Ciudad Real
‘Rolando 2:15-2:45. 50 años de la primera masacre de ETA’, la exposición
itinerante organizada por el Centro Memorial de las
Víctimas del Terrorismo que reconstruye el atentado con motivo de su
quincuagésimo aniversario.
La muestra, que ha visitado el rector de la Universidad de Castilla-La
Mancha, Julián Garde, acompañado por el director del Departamento de
Historia, Francisco Alía; y por el decano de la Facultad de Letras y
decano de la exposición, José Antonio Castellanos,
está estructurada en 22 paneles (con códigos QR) y en ellos se
intercalan los diferentes hitos del atentado con la historia personal de
las 13 víctimas mortales. Uno de los paneles está dedicado a los
héroes, a las personas que arriesgaron su vida para ayudar
a los afectados, y ahí se encuentran vecinos, empleados de los
establecimientos afectados, bomberos, policías, sanitarios y taxistas.
Su rápida y valiente actuación salvó multitud de vidas.
La exposición podrá visitarse de lunes a jueves de 09:00 a 20:30 horas y
los viernes de 09:00 a 14:30 horas. Con ella, la Facultad de Letras
pretende contribuir al conocimiento por parte de las jóvenes
generaciones de esta parte de la historia democrática,
por cuya acción sus autores quedaron impunes por la Ley de Amnistía de
1977. ETA no confirmaría la autoría de esta masacre indiscriminada hasta
el comunicado de su disolución, en 2018.