Bajo un cielo nublado y con un viento constante que añadió un desafío extra, especialmente en los tramos más abiertos del recorrido, la salida en Santurtzi estuvo marcada por el ambiente festivo que siempre acompaña a esta prueba, consolidada como un clásico de otoño en Euskadi. Pese a las condiciones, los corredores, llenos de ilusión, se enfrentaron al exigente trazado con la determinación que caracteriza a los grandes eventos del atletismo popular.

En categoría masculina, el keniano Amón Kiotoo mostró una vez más su supremacía en la ruta, imponiéndose con un tiempo que dejó sin opciones a sus rivales. En la categoría femenina, la victoria fue para la atleta del Bilbao Atletismo, Kaoutar Boulaid, que dominó la prueba con solvencia, reafirmando su posición como una de las corredoras más destacadas del panorama nacional.

Entre los participantes destacó la representación del equipo CDE JM Serna, que viajó desde Tomelloso para vivir esta experiencia única. Desde el club queremos agradecer el excelente trato recibido por parte del Club Atletismo Santurtzi y su presidente, Óscar Álvarez, quien, además de brindarnos una cálida bienvenida, ha aceptado la invitación para participar en la próxima 10km Ciudad de Tomelloso.

El equipo estuvo compuesto por Ángel Castro Caro, Godofredo, José Juan Ticscar, José María Serna, y contó con actuaciones destacadas de Ángel Luis Pedraza y Gonzalo García, quienes firmaron marcas personales que, hace apenas un mes, parecían inalcanzables. Estos resultados reflejan el esfuerzo y la constancia en los entrenamientos del grupo, confirmando que el sacrificio da sus frutos.

Además, destac la participación de la atleta tomellosera Elena Vergara, del Club Manchego de Ciudad Real, quien dejó una excelente impresión en la carrera, representando con orgullo a su tierra.

La llegada a Bilbao, junto al icónico Museo Guggenheim, fue el colofón perfecto para una prueba cargada de emociones. El viento, que se hizo notar especialmente en la segunda mitad del recorrido, no fue suficiente para apagar el ánimo de los corredores ni la energía de un público entregado a lo largo del trazado.

Desde el CDE JM Serna, queremos felicitar a todos los participantes por su esfuerzo y a la organización por el impecable desarrollo del evento. Sin duda, la Santurce-Bilbao es más que una carrera: es una celebración del espíritu deportivo y del compañerismo. "Volvemos a Tomelloso con las piernas cansadas pero el corazón lleno de alegría y agradecimiento, ya soñando con la próxima edición de esta legendaria prueba. ¡Gracias, Santurtzi! ¡Gracias, Bilbao! Y enhorabuena a todos los que hicieron de esta carrera un día inolvidable", han señalado.