Las primeras estimaciones sobre la producción de aceite de oliva en Castilla-La Mancha y en la provincia de Ciudad Real durante la campaña 2024-25 reflejan un acercamiento a una producción media habitual, superando notablemente a la del año anterior que fue calificada como baja.

Así lo pone de manifiesto Elisa Fernández, responsable de Olivar de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) en Castilla-La Mancha, quien explica que si todo sigue por los cauces previstos y el final de campaña se desarrolla dentro de unos parámetros normales, durante la campaña 2024-25 “Castilla-La Mancha podría alcanzar las 135.000 o 140.000 toneladas”, de las que “en torno al 47% se producirá en la provincia de Ciudad Real”.

De cumplirse estas cifras, la producción en Castilla-La Mancha “podría verse incrementada en torno a un 29% por encima de la campaña pasada”, aclara.

En este sentido, Elisa Fernández pone de manifiesto que hay zonas de la región “donde no se ha producido un incremento respecto a la campaña pasada, mientras que en otros lugares la producción ha estado por debajo y en otras comarcas va a estar por encima”.

A este respecto pone de manifiesto la importancia que tienen las lluvias caídas durante la primavera y que afectan directamente a la floración del fruto, indicando que “en los sitios donde llovió en condiciones, permitió una muy buena floración”.

“En la zona de Valdepeñas la producción puede verse incrementada un 25% esta campaña”

Ahondando en la producción de aceite de oliva comarcas, Fernández señala que “en algunas zonas como la de Valdepeñas este año va a haber un 25% más de producción que la obtenida durante la campaña 2023-24”, pero “luego está la zona del Campo de Montiel, donde más o menos la producción se va a quedar igual que estaba, y la comarca de la Jara, en la provincia de Toledo, que va a experimentar una merma de un 40% o un 50%”.

Por todo ello, la responsable de Olivar de UPA en Castilla-La Mancha considera que la campaña de aceite de oliva en la provincia de Ciudad Real y en el conjunto de la región se puede considerar como “buena”, indicando que “la media de la campaña en Castilla-La Mancha suele estar en torno a las 125.000-130.000 toneladas, mientras que este año será más o menos similar o ligeramente superior”.

Respecto a la calidad que presenta el aceite apunta que “será buena” y “estable”, aunque advierte que en unas zonas será mejor que en otras.

Está previsto que la campaña de aceituna termine en Castilla-La Mancha durante los primeros días de febrero debido a que este año, al haber habido una mayor producción, la cosecha se ha extendido unos días en el tiempo.