La Voz de Tomelloso tuvo oportunidad de colaborar en un taller de periodismo que semanas atrás desarrollaron alumnos de sexto del colegio Virgen de las Viñas de Tomelloso.  Los alumnos trabajaron sobre la entrevista y la culminación de ese trabajo fue la realización de varias entrevistas a personas de distintos ámbitos de la ciudad: la política, el deporte, la ciencia o el mundo del espectáculo. En los trabajos, los escolares  manejaron bien las herramientas de este conocido género periodístico con preguntas interesantes y sinceras, nacidas de la saludable espontaneidad de quienes aún no han entrado en el complejo mundo de los adultos. Preguntas bien trazadas que  permitieron extraer lo mejor de sus entrevistados.

Una de ellas fue al mago JoQuer. Fue realizada por Alberto Moreno Rodríguez, Mario Dindire Rosales, Claudia González Chaparro y Sergio Salgado López, arropados por su excelente y paciente maestra, Carmen Lara.  Reproducimos en su integridad una entrevista en la que se produjo un alto grado de complicidad entre entrevistadores y entrevistado. El escenario fue la casa del mago.

La pasión por el comodín de la baraja hizo que Fernando Salgado tomara el nombre del mago JoQuer, un poco también por el conocido personaje del cine, aunque cambiando la K por la Q, como una dosis de autoestima que se resintió en los inicios por un pequeño fracaso  al que se referirá en el inicio de la entrevista. Hoy día es un mago consolidado que ha aparecido por varios programas de televisión y que sigue aumentando su prestigio y reputación. El público siempre espera lo mejor con su espectáculo “Más allá de lo imposible” que estrenó el pasado 5 de enero.

-¿Por qué decidió ser mago?

- Sobre todo por superación. Un día me sacaron para colaborar en un espectáculo de magia y aquello no salió nada bien. No acerté a realizar lo que el mago me pedía y  hasta me dijo que era un patoso. Me pidió que me bajara del escenario y me fui a casa muy triste. Para superar esa espina le pedí a mis padres que me compraran el famoso juego de Magia Borrás y a partir de ahí empezó todo.

-¿Qué tipo de magia realiza?

-Tengo estructurado mi espectáculo en tres partes: magia de cerca, magia de escena y también un espectáculo infantil

-¿Cómo fue su primera actuación como mago?

-Fue ante gente cercana de la familia y fue complicado, no salió nada bien. Estrené todo el material de la caja de Magia Borrás  y yo mismo noté que las cosas no marchaban demasiado bien. A pesar de todo, la familia me animó, pero noté que no les gustó demasiado lo que hice. Entonces me propuse hacer algo para gente que no me conociera porque era la única manera de que fuesen sinceros. A partir de ahí salí a hacer magia por los bares y las terrazas. La primera actuación, digamos más profesional, fue ante mis compañeros y profesores del instituto. Puse ilusión en demostrar todo lo que había aprendido y  me aplaudieron mucho. La recuerdo con mucha emoción y cariño.

-¿Cómo reaccionó su familia cuando supo que su vocación era ser mago?

-Lo supieron cuando ya llevaba haciendo magia algunos años. Cuando se enteraron me regañaron, pero a la larga me apoyaron y ahora son un pilar muy fuerte en mi carrera artística. 

-¿Qué inconvenientes y ventajas cree que tiene ser mago?

-Inconvenientes ninguno, creo que son todo ventajas. Tienes que tener claro que te gusta la magia y luchar por ella. La magia no es fácil, hay que estudiarla y mimarla mucho. Me encanta hacer reir al público y yo soy el primero en divertirme también en este apasionante mundo.

-¿Cómo prepara sus actuaciones?

-Esté donde esté suelo ir acompañado de un bolígrafo y un bloc de notas para anotar ideas y cosas que me llaman la atención. Después junto esas ideas e inspiraciones y siempre acaba naciendo algo interesante.

-¿Cuál es la actuación que recuerda con más cariño?

-Sin duda, una levitación que hice con mi hermano. Lo hice volar en un teatro en el que había 500 personas. Ese número me permitió entrar en el apasionante mundo de las grandes ilusiones.

-¿Impone mucho respeto el público que tiene delante?

-Soy feliz haciendo magia, hay que creérsela. Por ello, río, lloro y me asombro igual que le puede pasar al público que me está viendo. Lo que siente el público, es lo que yo siento también. Cada actuación y cada público tiene unas circunstancias diferentes. Tengo muchas anécdotas de cosas que me han pasado porque como dijo alguien “hay gente pa to”.

-¿Cree que un personaje tan famoso como Harry Potter ha puesto más de moda la magia?

-Está claro que la saga de libros y películas de Harry Potter ha propiciado que haya mucha más gente que se interese por este mundo. La verdad es que sí, ha sido beneficioso, aunque os tengo que confesar  que yo solo he visto las dos primeras películas.

-De no ser mago, ¿qué profesión le hubiese gustado tener?

-Me atrae mucho la sicología. De hecho, recuerdo como solía ayudar a compañeros de instituto que tenían alguna inquietud o problema. La sicología me gustaba tanto que hasta me compré un libro para adentrarme en ese apasionante mundo. Me costó entenderlo, pero poco a poco fui aprendiendo cosas. Creo que la magia y la sicología tienen muchos puntos de encuentro y por eso la disfruto tanto.