El consiliario de la Hermandad, José Ángel Martín, ha oficiado una misa donde la figura de Ángel Luis ha estado muy presente. “En presencia de la Virgen de las Viñas estamos aquí para recordar el servicio y la entrega de Ángel Luis con nuestra madre. De sus palabras y consejos aprendimos mucho”, ha señalado. En otro momento de la celebración ha tomado la palabra, Alejandro Ramírez, que ha recordado la trayectoria y labor de Ángel Luis, especialmente aquel inolvidable domingo en el que regresó de Sevilla tras su restauración. “Ángel Luis engrandeció esta Hermandad y nos deja un gran legado. Sabemos que sigue con nosotros y con su Virgen de las Viñas,  se nos encoge el corazón al sentir su presencia. Le estaremos eternamente agradecidos”. Tras sus palabras, Ramírez ha entregado un recuerdo a Inmaculada que sin poder ocultar su emoción ha señalado que “nunca nos cansaremos de agradecer las continuas muestras de cariño que le estáis dando a Angel Luis”. Las personas que llenaban la Ermita han irrumpido en un gran aplauso.

Después ha llegado el momento de descubrir la placa en el paseo central del Santuario. Ha aparecido la foto de un Ángel Luis sonriente, luciendo su típica sonrisa y ataviado con la blusa y el pañuelo de yerbas. Junto a la foto, que fue tomada por Carlos de la Osa, aparecen unos versos de Faustino Rosado. En ese paseo, los familiares  han recordado vivencias romeras de un Ángel Luis Cabañas que ya es eterno en el Santuario de la Virgen de las Viñas.