El presidente del colectivo vecinal, Antonio Ligero, se ha mostrado muy ilusionado ya que después de dos años los peleles volvían a la calle y se ha congratulado de la asistencia de un buen número de vecinos y vecinas. Ha recordado que durante los dos años que la pandemia ha impedido celebrar esta tradición no ha faltado un judas el Domingo de Resurrección en el balcón del Centro de Barrio. El acto ha contado también con la participación del Grupo Joven de la asociación, creado este año.

El mateo del pelele, ha explicado Ligero, es una forma de vilipendiar a judas, representado por los muñecos que se mantean a ritmo de las canciones procaces de las mujeres mayores. Es una tradición de Tomelloso y de toda La mancha que se fue perdiendo poco ha poco, ha apuntado el presidente. Asegura que la tradición la recuperó el Barrio de Maternidad y luego se han sumado otros, como el del Moral, Embajadores y el barrio del Pilar.

Nada menos que siete peles y sus correspondientes mantas se han preparado además de una maroma con la que se ha jugado a la comba. Un grupo de señoras entonaban coplas divertidas y muy verdes. mientras los peleles subían al cielo a la voz de ¡¡arriba!!

Dejábamos al grupo dando cuenta de un zurra manchego y unos dulces manchegos con los que reponerse y seguir con la fiesta.