Contaba
el científico Richard Dawkins al recordar sus días de colegio cómo se
emocionaba cuando los profesores le enseñaban a descubrir los hechos.
Puede haber muchas formas de explicar
cuál es la magia del aprendizaje, pero la manera en la que Dawkins lo
dijo, resulta, quizá, la manera más científica y objetiva de explicar
cuál es la verdadera función docente: enseñar a descubrir los hechos, a
descubrir el funcionamiento del mundo y, por
ende, también el pensamiento del ser humano.
Los
docentes dan sentido a una amalgama de conocimientos que resultan
abrumadores a quienes comienzan sus días de escuela, lo que no quiere
decir que sean capaces de dar todas las respuestas,
pues la curiosidad humana hace que jamás estemos satisfechos con lo que
sabemos. Así, quienes se dedican a enseñar no solo deben organizar esa
multitud de saberes sino señalar la gran cantidad de caminos y provocar
que nos cuestionemos por qué sabemos lo que
sabemos; por qué sabemos algo de esa manera y no de otra; qué relación
hay entre eso que sabemos y lo demás; qué pasaría si eso que sabemos no
fuera así o por qué eso es importante y por qué es importante saber eso.
Es decir, algo que nos puede parecer secundario
es tan trascendental como poner en práctica los principios de
perspectiva, de relación, de suposición, de relevancia y de utilidad.
¡Ahí es nada! ¿Qué más se le podría pedir a un docente o una docente?
Poco más, porque ofrecer conocimiento es ofrecer libertad.
Hoy es el día en que celebramos en España el día del maestro, la
maestra, la profesora, el profesor y los enseñantes en general. Hoy es
un buen día para recordar y reconocer
a todos aquellos y aquellas docentes que nos enseñaron a descubrir los
hechos y nos ayudaron a ser un poco más libres. Hoy es el día para
recordar el entusiasmo de unos, la paciencia de otros, el humor con el
que analizaban y desacralizaban la realidad o la
seriedad con la que se podían tomar lo que hasta el momento solo había
sido divertimento.
En Castilla-La Mancha tenemos una plantilla de docentes que ha sabido
asombrar a sus estudiantes, ha desarrollado una creatividad fuera de
toda duda y ha sabido convertir lo
extraordinario en ordinario y lo ordinario en extraordinario, de tal
manera que nuestro alumnado ha obtenido una enseñanza fuera de lo común,
pero con la mejor calidad que las circunstancias lo han permitido.
Hoy,
como he hecho otras tantas veces, quiero felicitar su labor de entrega,
su creatividad y su talento, pues además de enseñar, señalan el futuro
al que debemos dirigirnos como sociedad.
Por otro lado, el Gobierno de nuestra región es consciente de que el
mundo discurre a velocidad vertiginosa tanto en conocimientos como en
tecnologías, y por ello sabe que los
profesionales de la educación, a diferencia de lo que pudo suceder en
otras épocas, deben formarse constantemente y así lo hacen, pues nuestra
juventud necesita docentes actualizados para satisfacer la necesidad
tan básica como es aprender y, en especial,
aprender en el siglo XXI.
El
Centro Regional de Formación del Profesorado de Castilla-La Mancha está
al tanto de esa necesidad y demanda docente y desarrolla multitud de
encuentros, jornadas, cursos, talleres, etcétera,
en diferentes modalidades para que quienes deseen continuar formándose
encuentren la manera que mejor se adapte a sus necesidades, con el fin
de enseñar a su alumnado a descubrir los hechos.
Hoy, más que nunca, felicidades a todas y todos los docentes, descubridores de hechos e impulsores de la libertad.
Emiliano García-Page
Presidente de Castilla-La Mancha
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Jueves, 2 de Mayo del 2024